El delincuente salmantino que fue detenido por la Policía Nacional tras protagonizar una espectacular huida por calles céntricas, en la madrugada del 25 de febrero, ingresó ayer en la macroprisión de Topas por orden judicial, mientras se investiga también si es responsable del robo en una carnicería de la capital. El arrestado, con antecedentes penales y cuyas iniciales son J.A.D.G., intentó atropellar a los agentes, que tuvieron que disparar a muy corta distancia a la rueda delantera del turismo, a pesar de lo que les resultó imposible alcanzarle. El hombre logró huir a pie, tras abandonar el coche en el pasaje de Cardenal Cisneros, si bien la Policía le dio alcance en la estación de autobuses, después de que recorriera varias calles, informó la Comisaría de Zamora.

El arrestado, acusado de conducción temeraria, circulaba con un vehículo robado en Salamanca cuando fue descubierto en las inmediaciones de la carnicería que fue asaltada en esa misma madrugada. Emprendió una huida, en la que «circuló por direcciones prohibidas y generó situaciones de riesgo para personas y vehículos» por las calles de Cardenal Cisneros, Arapiles, Cristo Rey, Magallanes y adyacentes.