La nueva Finca experimental y de conservación de razas autóctonas de la Diputación ya tiene vida. Ayer mismo, representantes de todas las administraciones locales se reunieron en Madridanos para conocer el espacio de 26 hectáreas que toma el relevo de La Aldehuela, cuyos terrenos serán destinados a la construcción de un complejo deportivo y de ocio. Allí, el presidente provincial, Fernando Martínez Maíllo, recalcó que esta «iniciativa pionera» en la región ayudará a consolidar la posición de Zamora como líder en producción ecológica de Castilla y León.

En efecto, el centro ya es la nueva casa de 16 vacas de las razas locales sayaguesa y alistano-sanabresa y de 13 burros de origen zamorano-leonés. A su alrededor verán crecer 19 hectáreas de trigo y cebada en régimen ecológico tras un preparación específica de los terrenos que permitirán mejorar su genética. Martínez Maíllo recordó que la «presión de la ciudad» fue la que obligó al traslado de las especies animales y que el proyecto inaugurado ayer pone el broche a la «habilidad» de los políticos de los años ochenta y a la capacidad de los «magníficos profesionales de la institución», que han permitido conservar las razas locales.

Un almacén, un cobertizo para el ganado, otro para las novillas, un depósito de agua además de las oficinas y otros edificios complementarios permitirán desarrollar los tres grandes objetivos anunciados por los responsables. Además de la conservación y la mejora genética de las razas locales, el centro tendrá una función de asesoramiento, principalmente, para aquellos agricultores y ganaderos que cambien su producción al régimen ecológico.

La tercera clave es la educación medioambiental, ya iniciada con éxito en La Aldehuela, y que permitirá a alumnos de Primaria y Secundaria conocer y valorar las razas zamoranas y los cultivos de vanguardia. «Damos un mensaje de conservación y de respeto al medio ambiente que supone un orgullo para la institución», reconoció Maíllo.

Alcaldes de la comarca del Vino y del resto de la provincia, además de profesionales de la ganadería y la agricultura arroparon el recorrido por las instalaciones. Estos últimos reconocieron la «relevancia» de un centro de este tipo. Como el responsable de la Asociación de la Raza Sayaguesa, Antonio Domínguez, quien apuntó que los ganaderos recurren a la finca experimental para «mejorar la cabaña, porque tienen buenos ejemplares de la raza de antes». Por su parte, el presidente de Fagacyl, Justo Puente, destacó el «gran interés» que estas iniciativas tienen para los profesionales locales, mientras que el secretario de Aszal, Jesús de Gabriel, añadió que las instalaciones complementan otros centros de la provincia dedicados a la conservación y la mejora genética.

Por otra parte, el responsable de la Diputación reiteró que, pese a la crisis, el proyecto del centro deportivo y de ocio «sigue en pie». La institución tiene previsto licitar la obra el próximo mes de abril, una vez negociadas las condiciones del proyecto con las cuatro empresas que concurren al concurso. Las compañías deberán pagar el proyecto y ejecutarlo y tendrán como contraprestación la explotación de las instalaciones durante treinta años.