Caja España-Duero ha decidido «desalojar» de los consejos de administración de sus empresas participadas a los consejeros procedentes del mundo de la política o entidades representadas, con el fin de colocar a técnicos en estos puestos.

La medida provocará la salida de al menos dos zamoranos de los consejos de administración de diez de las empresas de Caja España-Duero, aunque se desconoce si afectaría a alguno más de sociedades donde la participación de la principal entidad financiera de la región tiene una participación minoritaria.

Uno de los zamoranos que saldrían de estos consejos es el presidente de la Diputación de Zamora, Fernando Martínez Maíllo que, como otros presidentes de diputación o alcaldes de la región ocupan puestos similares. Martínez Maíllo es consejero de Inmocaja S. A. Sociedad Unipersonal, Gestión de Inversiones de Alquileres S. A., Invergastión Sociedad de Inversiones y de Gestión S. A. y Caja España Asesores, Operador de Banca-Seguros Vinculado S.A.U.

Zamorano de nacimiento es también otro consejero, Gerardo Pastor Ramos, religioso y ex-rector de la Universidad Pontificia de Salamanca, que está en el consejo de administración de Caja España-Duero por el apartado de entidades de interés general. Pastor Ramos figura como consejero en Grupo de Negocios Duero S. A., y sería también uno de los afectados por la medida que tendría como una de las principales cualidades la despolitización, la profesionalidad, la búsqueda de la eficiencia e incluso un ahorro de costes.