La provincia ha registrado tan sólo un accidente laboral mortal hasta el pasado mes de julio, tres menos que durante el mismo periodo del año anterior, según los últimos datos de la Junta de Castilla y León. En total, los zamoranos han sufrido 867 siniestros en el trabajo durante los siete primeros meses del año, 181 menos que en 2010. De ellos, 850 han sido de carácter leve, frente a los 1.034 del año pasado. El único aumento se produce en los accidentes graves, 16 en lo que va de año, lo que supone un aumento de seis casos respecto al año pasado.

En Castilla y León, la cifra total de sucesos laborales asciende a 17.089 hasta el pasado mes de agosto, lo que supone una bajada del 15% respecto al año anterior, según destacó ayer en Zamora el director general de Trabajo y Prevención de Riesgos Laborales de la Junta de Castilla y León, Carlos Díez. De la cifra total de siniestros, 20 fueron mortales, 168 graves y 1.575 in itinere.

La mayor concienciación y la crisis son dos de los factores que sirven para explicar el descenso de la siniestralidad laboral. «La población, tanto trabajadores como empresas, está cada vez mas sensibilizada, a lo que se suma un descenso de actividad», razona el director de Trabajo. Sin embargo, destaca que «la reducción de accidentes ha sido mayor que la de actividad por lo que creemos que todas las medidas que estamos tomando son acertadas y que los empresarios y trabajadores cada vez están más concienciados».

El descenso de la crisis también supone una modificación de las estrategias de prevención de riesgos laborales. El presidente de la Asociación Zamorana de Empresarios de la Construcción asegura que «la crisis ha incorporado un cambio muy importante que hará necesario cambiar el sistema de prevención y de formación para adaptarlo a los nuevos nichos de mercado».

Entre estos nuevos sectores, Alonso expone que «el descenso de obras nuevas provocará un aumento de las obras más relacionadas con la conservación de patrimonio, la regeneración urbana o la rehabilitación, lo que hará necesario una formación en prevención de riesgos laborales diferente y más innovadora».

En cuanto a la posible relajación de las empresas en materia de prevención de riesgos laborales, el presidente de Azecop asegura que «el tamaño de empresas disminuye, lo que reduce su responsabilidad y aumenta la de los servicios de prevención».