Expresiones como «una locura» o «indispensable», son las que salen de la boca de los docentes zamoranos cuando se le plantea la posibilidad de suprimir la hora de tutoría en la ESO.

La decisión del Gobierno de Madrid de utilizar ese espacio de tiempo para reforzar las asignaturas de Lengua y Matemáticas no está bien vista por los sindicatos de Educación de la provincia, que ven muy necesaria esa hora a la semana «para tratar valores con los alumnos, que son muy necesarios en los tiempos que corren», se expresa el responsable de Enseñanza de UGT en Zamora, Ángel del Carmen, que califica de «imprescindibles» aspectos como las charlas sobre prevención de drogas o alcoholismo, así como técnicas para cohesionar el grupo «con el fin de que funcione y rinda mejor», explica el docente. «No por tener más nivel en Lengua o Matemáticas van a ser mejores personas», subraya en una férrea defensa por la hora que el tutor pasa a la semana con sus alumnos.

Un mediador, un intermediario entre el resto de profesores y los alumnos y la figura más protectora dentro del centro. Así definen los propios docentes al tutor de un grupo de alumnos, razón por la que no consideran beneficioso para los adolescentes que se suprima ese tiempo «en el que se les habla de aspectos de la vida, de organización del centro, de cómo hay que comportarse, sobre los buenos hábitos? y no de contenidos como en el resto de asignaturas», se pronuncian desde el sindicato de trabajadores de la Enseñanza STES en la capital.

El tutor, según los docentes, es el que más tiempo pasa con sus alumnos y al que ellos acuden cuando tienen algún problema en el centro, por eso «es muy importante reforzar estos vínculos entre tutor y estudiantes y tener ese tiempo semanal para decirles qué es lo que hay que mejorar en el grupo, cómo hacerlo y por qué», explica una docente del sindicato.

La fórmula que han encontrado en Madrid para solucionar esos problemas del aula es sacar ese tiempo del horario lectivo y convertir esas sesiones grupales en individuales, otro error para los docentes, que afirman que «es en el conjunto en el que se puede actuar, porque la convivencia es muy importante y con ratos como esos, hablando con los alumnos, es como se consigue que puedan comprender lo que supone el abuso del alcohol o qué beneficios entraña la multiculturalidad en una clase», se pronuncianfn' los docentes.