Los incidentes que se produjeron durante y tras el pleno de constitución del Ayuntamiento de Zamora «estaban orquestados y dirigidos bien por un concejal bien por alguien del público que informaba, y fuera estaban con cámaras y vídeos para grabarlo».

Así de tajante se muestra el presidente provincial de los populares, Fernando Martínez Maíllo, que califica lo acontecido como el «hecho más grave en la historia de la democracia en Zamora». Por ello pide a la autoridad competente que actúe de oficio identificando a los posibles agresores para que sea luego la Justicia la que se pronuncie. «No solo identificar a estas personas violentas, sino que se aplique la ley, porque hay que perseguir a los delincuentes y hay amenazas, agresiones y atentado a la autoridad que son perseguibles de oficio».

Para él se trata de la «actuación de personas violentas, porque intentaron agredir y en muchos los consiguieron, incluso tirando cajas sobre la alcaldesa». Fueron momentos, ilustra, «más parecidos a la kale borroka que a otra cosa». Maíllo reprocha a IU que califique a los miembros del 15-M que querían asistir al pleno municipal de «pacíficos».

Los manifestantes, asegura, «no eran valientes, porque iban con máscaras y pintados, tampoco neutrales, porque detrás hay una ideología. Son violentos de extrema izquierda». Esa «violencia y agresividad es», sostiene, «el límite a lo que hasta ahora han podido expresar libremente gracias a una democracia en la que se puede defender todo».

Fernando Martínez Maíllo agradece el apoyo prestado por todos los partidos políticos salvo Izquierda Unida, coalición en la que «incluso algunos han avalado las actuaciones y no han condenado la violencia, algo que es muy grave». El líder de los populares zamoranos matiza también que estos hechos «se podían haber evitado con medidas de carácter preventivo» porque «la Policía Nacional recibió órdenes de no intervenir y si llegué a casa sano y salvo fue por la Policía Municipal». Por último, el presidente del PP cuestiona que la concentración de integrantes del 15-M junto al Ayuntamiento estuviera comunicada a la Subdelegación del Gobierno y anuncia «un seguimiento para saber si están persiguiendo a los autores de las agresiones y si se abren diligencias». El PP de Zamora, concluye, está dispuesto a trasladar lo acontecido, subraya Maíllo, al ministro del Interior para que ofrezca explicaciones sobre las medidas adoptadas.

Por otro lado, el PP confirmó ayer que el diputado provincial número 15, por decisión de la dirección, será Santiago Lorenzo, ex alcalde de Villaralbo, localidad en la que estamos preparados para gobernar en cualquier momento pese al pacto forzado entre PSOE e IU». En las elecciones «el PP ganó las elecciones en Villaralbo y la alianza entre PSOE e IU es un pacto a presión forzado por los dirigentes provinciales y regionales contra la voluntad de sus propios concejales en la localidad», denuncia.

Los populares no ocultan su satisfacción por el resultado de los pactos conseguidos con otras fuerzas políticas para gobernar ayuntamientos. de los 14 que estaban pendientes con mayoría del PP el partido gobernará en 5, mientras que en otros 3 se formará gobierno. En definitiva, especifica Martínez Maíllo, hay ocho ayuntamientos de la provincia más en los que la influencia del PP es decisiva».

En el caso del PSOE esta situación se produce en dos municipios en los que ha conseguido pactar, «uno con apoyo precisamente del PP, Belver de los Montes», informaron los dirigentes populares tras el comité de dirección celebrado ayer en la sede del partido.