Los farmacéuticos se niegan a dispensar antibióticos sin receta médica. La medida se viene aplicando ya desde hace tiempo, pero ayer tanto el vocal de oficinas de farmacia, Juan Prieto Corpas como el presidente del Colegio, José Espinosa Navarro, incidieron en ella, durante la campaña que han iniciado las 167 farmacias de la capital para evitar el uso incorrecto de los antibióticos, causa de la aparición de resistencias bacterianas que hace ineficaces los tratamientos contra ellas. Precisamente el título de la campaña es «Los antibióticos, siempre con receta en la farmacia» y trata de concienciar al paciente sobre la importancia de un uso correcto de los antibióticos.

En este sentido los profesionales desaconsejan tomar antibióticos sin que el médico haya diagnosticado su idoneidad para tratar una enfermedad, ya que de hecho la mayor parte de catarros y gripes invernales están causados por virus, contra los que los antibióticos nada pueden hacer, salvo empeorar las cosas. Tampoco se debe tomar de nuevo un antibiótico que fue recetado para un proceso anterior y del que el paciente guardaba en casa las pastillas que le habían sobrado. Y, muy importante, hay que cumplir el tratamiento prescrito, ya que existe una práctica muy extendida de abandonarlo «en cuanto se nota una mejoría», señaló Prieto Corpas.

«Las bacterias multirresistentes pueden causar una amplia variedad de infecciones, por lo que los pacientes hospitalizados corren el riesgo de contraer estas infecciones que no están relacionadas con el motivo de su ingreso y pueden comprometer seriamente los transplantes de órganos, la quimioterapia contra el cáncer y los cuidados intensivos», indicó Espinosa Navarro. Los farmacéuticos pidieron el apoyo de la población para evitar conductas de presión sobre el médico, enfermera o el farmacéutico en busca de recetas.