La Fundación Patrimonio Histórico de Castilla y León aprovechó la celebración de su fiesta anual en la capital para hacer un repaso de los trabajos que acomete en la actualidad en la provincia, con la restauración de la sillería del monasterio de San Martín de Castañeda como uno de los proyectos más destacados. El organismo -cuyos patronos son las cajas de ahorros y la Junta de Castilla y León- apuesta por devolver el conjunto de piezas a su emplazamiento original o bien, dejar al descubierto una parte para «realzar elementos que permanecían ocultos».

Ésa fue la reflexión del presidente de la fundación, Agustín González, quien advirtió que el trabajo en el edificio de San Martín de Castañeda «las cosas se hacen con mucho rigor y se está trabajando para quedar muy claritas las fechas de cada uno de los añadidos». En cuanto a la ubicación definitiva de la sillería, González apuntó que «son los técnicos quienes decidirán», pero puso sobre la mesa las dos posibilidades que barajan los responsables en la actualidad. «Puede volver al mismo sitio en su totalidad o sólo una parte, porque también hay cosas escondidas detrás de la sillería, que obligue a que se realce eso que estaba oculto».

Tanto en el inmueble de Galende como en el resto de restauraciones que acomete la Fundación, González destacó que «al final se consigue un buen trabajo y el resultado siempre es sorprendente». Es preciso recordar que este organismo trabaja también en la recuperación del Puente de Toro y en el Castillo de Villalonso.

En el primero de los casos, Agustín González aseveró que el equipo responsable está trabajando el plan director, mientras que en Villalonso están finalizando las obras de recuperación, que han necesitado de una inversión de 575.000 euros. Asimismo, González se refirió al «trabajo de pronóstico» que se está haciendo en un nuevo proyecto en Puebla de Sanabría, que aún no cuenta con la financiación necesaria. «Esperamos que se pueda llevar a cabo a través del 1% procedente del Ministerio de Cultura», añadió el máximo responsable de la entidad, asimismo presidente de la Caja de Ávila.

Por lo demás, González alabó las diferentes iniciativas de recuperación del patrimonio artístico y arquitectónico que se están llevando a cabo actualmente en lugares como Zamora, donde confluyen programas como «Zamora Románica» o el futuro plan «Románico Atlántico». «Cuando uno se encuentra con la riqueza y variedad en el patrimonio cultural de nuestra comunidad, todo lo que se hace es poco», defendió el presidente de Patrimonio Histórico, quien reconoció que «es cierto que resulta complicado darles uso a algunos templos», particularmente aquéllos situados pequeños pueblos con un número testimonial de visitantes.

A la cita anual, que incluía la entrega de los premios «Patrimonio» de periodismo y «Los Nueve Secretos» para escolares, asistió el viceconsejero de Cultura, Alberto Gutiérrez, además de la propia alcaldesa, Rosa Valdeón. Tanto ellos como el resto de autoridades e invitados a la cita aplaudieron la intervención de Agustín González, quien recordó en su discurso la importancia de intervenir en el legado histórico antes de que desaparezca. Asimismo, el presidente de la fundación se refirió a la creación de empleo como una de la realidades más importantes en el panorama actual. González definió los puestos de trabajo generados como «de calidad».

Tras la entrega de premios, la fiesta continuó con la actuación del humorista Leo Harlem en el salón de actos de Caja España, que se llenó para apoyar la labor de la Fundación del Patrimonio Histórico.

La Fundación del Patrimonio Histórico entregó ayer en su fiesta anual el premio «Patrimonio» de periodismo a Marta Martín, redactora del Diario de Ávila, y a Enrique Amigo, de Televisión Castilla y León. En cuanto a los escolares, tres centros educativos de Segovia y Valladolid se llevaron el galardón «Los Nueve Secretos 2010». Entre los segundos premios, figura el IES Tierra de Campos zamorano.