Abogado, miembro de fundaciones, tertuliano remunerado, profesor de universidad y miembro del consejo asesor de una empresa. Todas estas actividades privadas tiene autorizadas el diputado por Zamora Gustavo de Arístegui el parlamentario elegido en la provincia que sin duda mantiene más tareas con sueldo aparte de su trabajo como parlamentario. El resto prácticamente vive sólo de su puesto en el Parlamento, aunque algunos tienen autorizadas actividades como conferenciantes o autores de libros. Congreso y Senado, en un ejercicio de transparencia acaban de abrir al público, a través de sus respectivas páginas web las actividades declaradas de sus miembros fuera de los hemiciclos. Excepto dos, el resto de parlamentarios de Zamora declara no haber tenido que renunciar a ninguna profesión anterior para poder entrar el política de alto nivel.

Arístegui aparece con actividad privada como abogado, patrono de la Fundación «Arturo Canto Blanco» y presidente de la Fundación «Tolerancia y Libertad», si sueldo. Es tertuliano en «Punto Radio», donde cobra, e «Intereconomía», que le paga dietas, y además aparece ocasionalmente en otros medios de comunicación, pero sin remuneración. Es miembro del consejo asesor de «Siconet Ingenieros S.A.», por lo que percibe retribución, aunque no tiene responsabilidad ejecutiva.

Los otros dos diputados, el popular Antonio Vázquez y el socialista Jesús Cuadrado, no tienen otra ocupación que su trabajo parlamentario, aunque este último declara tener previstas «actividades docentes extraordinarias así como otras relacionadas con la producción literaria». Ninguno de ellos asegura haber tenido que renunciar a ninguna actividad pública al entrar como parlamentario, aunque Cuadrado era profesor.

Entre los senadores se pueden diferenciar dos grupos claramente. Uno estaría compuesto por el popular Jesús Sedano y la socialista Ana Sánchez, ya que ambos mantienen puestos en sus respectivos ayuntamientos, el primero con alcalde de Toro y la segunda como concejala en Zamora y viceportavoz del Grupo Municipal Socialista, aunque ninguno de ellos cobra por ello más allá de dietas e indemnizaciones. Sedano es, además, consejero general de Caja España en representación de su Ayuntamiento.

El otro grupo estaría compuesto por Dionisio García Carnero y Elvira Velasco, ambos funcionarios de la Junta de Castilla y León en servicios especiales, la segunda de ella en Sacyl, puestos a los que han tenido que renunciar para formar parte de los «padres de la patria». García Carnero declara percibir la remuneración de antigüedad como funcionario de la Junta de Castilla y León. Velasco, por su parte, declara como actividades conferencias sin remuneración relacionadas con su profesión de enfermera y su condición de política, así como la redacción de artículos o la asistencia a conferencias y tertulias relacionadas con su oficio.