Las mejores técnicas para prevenir pérdidas de memoria dependen de uno mismo. Este es uno de los principales mensajes que transmitió ayer el psicólogo clínico Vicente Merino, quien impartió ayer una conferencia titulada «Conservar la memoria para una vida saludable» con la que se inauguró la exposición «Memoriza», que permanecerá instalada en el Palacio de La Alhóndiga hasta el 22 de febrero para concienciar a los zamoranos sobre la importancia de mantener la mente activa.

-¿Cuáles son las técnicas más recomendables para evitar pérdidas de memoria?

-Las técnicas más recomendables son las más sencillas y las que mejor se adapten a la realidad de cada persona. Por eso lo mejor es dedicarse a hacer las actividades propias de la vida diaria. El concepto de ahorro y de dejar de hacer parte de esas actividades es el mayor inconveniente. No hay que dejar de hacer cosas, ni de tomar decisiones porque aunque parezcan fáciles muchas veces son complejas y se hacen de forma rutinaria. Nos damos cuenta de lo importantes y difíciles que son cuando las dejamos de hacer.

-¿El desarrollo de actividades asociadas a la rutina diaria son suficientes para mantener la mente activa?

-No hay que olvidar que la memoria depende de nosotros y al proceso de atención que pongamos. Simplemente repasar lo que tenemos que hacer da muy buenos resultados. En todo caso la memoria no es un aspecto único, sino que forma parte de un complejo proceso asociado a otras funciones cognitivas como los sentidos que permiten que el cerebro funcione. Es una cuestión que no se puede analizar desde una perspectiva aislada porque con ella se ponen en funcionamiento múltiples funciones. Al margen de las actividades diarias, también se puede realizar entrenamientos de carácter más artificial como la realización de puzzles o de ejercicios con números, pero lo mejor es mantener las actividades de la rutina diaria.

-¿Los problemas de memoria aparecen a edades más tempranas o se originan mayoritariamente en las personas mayores?

-Los problemas de memoria siguen apareciendo generalmente en personas mayores. Lo que ocurre es que se descubren más casos porque se investiga más y se hacen más evaluaciones preventivas. Vivimos en una sociedad en la que el nivel de salud es cada vez mayor y hay más sensibilización.

-¿Cuál es el perfil de las personas que sufren este tipo de deficiencias cognitivas?

-El perfil mayoritario corresponde a personas de una edad media de 70 años, que es cuando más suelen aparecer pérdidas de memoria. A partir de los 55 años también se pueden dar algunos casos pero generalmente las pérdidas de memoria no repercuten en las actividades diarias hasta los 65 o 70 años.

-¿Qué avances se han producido en este campo?

- La labor preventiva sigue siendo la más eficaz para evitar problemas de pérdida de memoria. También se puede recurrir a técnicas de psicoestimulación o rehabilitación aunque no hay que olvidar los límites biológicos de cada uno, se puede controlar hasta donde se puede.

-¿La pérdida de memoria es recuperable o irreversible?

-Depende de los factores que la provoquen. Si los problemas de memoria tienen su origen en factores traumáticos se puede recuperar, pero si las pérdidas son de origen degenerativo es más difícil.

-¿Cuál de estas dos causas es la más habitual?

-La mayor parte de los casos de pérdidas de memoria se deben a problemas degenerativos o a la enfermedad del alzheimer, pero no porque haya un aumento de pacientes, sino porque cada vez vivimos más.

-¿Cuáles son los principales síntomas que nos pueden indicar la aparición de estas enfermedadegenerativas?

-Los síntomas comienzan con olvidos muy simples, como pueden ser dejarse las llaves al salir de casa, el fuego encendido o ejemplos similares. Otra de las situaciones que puede dar es cuando una persona no se acuerda de lo que se hizo el día anterior. Siempre se trata de olvidos a corto plazo, ya que los de a largo plazo son menos habituales. De hecho, se suelen emplear recuerdos a largo plazo como los de la infancia como enganche para desarrollar técnicas de recuperación de memoria o de reminiscencia.

Vicente Merino Barragán es especialista en psicología clínica y trabaja en la Unidad de Neuropsicología del Servicio de Psiquiatría del complejo asistencial de la capital, donde lleva trabajando más de 30 años. Este leonés de nacimiento, compagina su labor médica con la de profesor asociado del Departamento de Personalidad, Evaluación y Tratamientos Psicológicos de la Facultad de Psicología de la Universidad de Salamanca. Otra de sus facetas menos conocidas pero más recordadas está ligada al ámbito deportivo provincial, ya que ocupó el puesto del portero del equipo titular del Zamora Club de Fútbol en los años 70, donde cosechó una destacada trayectoria.