Un paso adelante, positivo y que prepara el terreno para el esperado pacto social y político para la educación. Así han recibido padres, profesores y sindicatos de enseñanza el texto con las 104 propuestas del ministro Ángel Gabilondo, para mejorar y fijar un nuevo modelo de educación, más eficaz y que reduzca el fracaso escolar.

La medida que más expectación ha suscitado es la de convertir a 4º de la E.S.O en el curso en el que los alumnos tendrán que elegir materias encaminadas a seguir sus estudios hacia el Bachillerato o hacia Formación Profesional. La medida resulta positiva porque «permite a los menores elegir pronto el camino que quieren seguir. Un camino en el que no todos tienen, pueden o deben mirar hacia la universidad, la FP tiene más salidas», destaca Fermín Casado, de ANPE. Sin embargo, también puede significar la creación de guetos, «en los que se coja una u otra opción por ser más o menos fácil y, además, niños que no están preparados para tomar ese tipo de decisiones», sostiene Carlos Macías, director del Centro de Formación e Innovación Educativa.

El aumento del presupuesto educativo del 4,9% al 7% es un punto clave para la mejora del sistema, «necesitamos ese dinero para aumentar los recursos con los que cuentan los centros, que tienen los departamentos de orientación cojos y saturados», indica Dionisio Muñoz, presidente de la Liga Zamorana por la Educación. La propuesta, de momento, sólo presentada en forma de borrador, intentará buscar la aprobación del resto de partidos. «Una condición indispensable, la necesidad de contar con el apoyo de los 2/3 del Parlamento para la aprobación, que significará sentar al fin las bases para estabilizar la educación», según afirma el presidente del Sector de Enseñanza del sindicato CSIF de Zamora.

Las primeras reacciones de la oposición no han acogido sin reparos el modelo, al que le han reprochado la falta de libertad de los padres para escoger la educación de sus hijos, así como la defensa del castellano. Dos aspectos que no tienen sentido para el presidente provincial y regional de las Asociaciones de Padres de la Escuela Pública, Jesús Murias que asegura que «esa libertad ya existe, porque sino no habría posiblidad de llevar a los niños a colegios concertados», en cuanto al idioma, «muchos se sorprenderían del buen uso que se hace del castellano en los colegios de comunidades con lengua propia», asegura.