La Dirección General de la Guardia Civil ha abierto un expediente disciplinario al guardia civil de Tráfico zamorano Juan Carlos Toribio Ramos, destinado en el Destacamento de Fraga, por denunciar irregularidades en la red de carreteras nacional a través de su participación en la organización sin ánimo de lucro Mutua Motera.

Esta es la tercera vez que Toribio sufre una amonestación de estas características por ir en contra de la prohibición que pesa sobre los guardias civiles de no poner en evidencia las irregularidades o deficiencias de las carreteras, a menos que sea por vía interna, «una fórmula que nunca es tenida en cuenta, porque cuando pasamos un informe acerca del mal estado de un tramo, las denuncias acaban acumuladas en carpetas y no sirven de nada», se lamenta Juan Carlos Toribio, que asegura que seguirá «luchando para que se reconozca el derecho que como ciudadano tiene para expresar sus quejas y las injusticias».

La sanción supone para el guardia civil la suspensión de seis meses y un día de empleo y sueldo y además puede suponerle la pérdida de destino.

El expediente que pende sobre el zamorano le imputa una falta muy grave «por considerar incompatible con mi profesión la realización de ningún tipo de actividad en pro de la seguridad vial, incluso si la labor se desarrolla en el tiempo libre y sin percibir remuneración alguna», explica el afectado, que asegura que «están contra mí, me quieren hundir, pero yo no voy a dejar de colaborar para, en la medida que me sea posible, ayudar a los ciudadanos».

El pasado mes de septiembre, Juan Carlos Toribio tuvo que pagar 500 euros en concepto de multa por denunciar, como miembro de la Asociación Mutua Motera, el mal estado de conservación de la carretera Nacional II, «porque incumplía la normativa legal y técnica, afectando gravemente a la seguridad. Una vía que gracias a esa denuncia al final se arregló», señala Toribio, quien se queja además de no poder llevar a cabo ningún tipo de campaña de educación vial, a pesar de ser considerado uno de los expertos más cualificados del país en esta materia, «además toda la formación ha corrido de mi cuenta porque los cursos que ofrece la Guardia Civil son prácticamente inexistentes».

Las tensas diferencias entre la cúpula de la Benemérita y el agente no son recientes. Ya en 2005 sus superiores le prohibieron representar al cuerpo en cualquier acto público por denunciar ante un auditorio varias irregularidades viales.

El agente también compagina su profesión con el desarrollo de actividades en otras ONG´s como Cruz Roja o Sabina Blanca, una asociación dedicada a evitar el consumo de droga entre los jóvenes.

La Asociación Mutua Motera ha puesto en marcha una campaña de apoyo a Juan Carlos Toribio mediante la puesta a disposición de todos los ciudadanos de un escrito de protesta dirigido al Ministro del Interior, con el fin de que todos aquellos que consideren injusto el proceder de la Dirección General de la Guardia Civil, puedan manifestar su rechazo enviando su queja directamente al ministro Alfredo Pérez Rubalcaba.

La Asociación Mutua Motera reivindica que se le retiren las sanciones que pesan sobre el agente, así como que se permita que los guardias civiles puedan impartir educación vial en los colegios y denunciar el mal estado de las carreteras. También reclaman desde la organización que se garantice la formación en materia normativa técnica de carreteras y que se permita a los agentes su plena integración en asociaciones sin ánimo de lucro.