La revisión del Plan General de Ordenación Urbana es un documento «incompleto en sus determinaciones, que plantea un crecimiento desmesurado e inexplicable para Zamora, que no se corresponde con sus expectativas reales, y que no tiene en cuenta los valores naturales del territorio». Así lo asegura el Colegio Oficial de Arquitectos en la alegación conjunta que ha presentado y que aún está pendiente de resolver.
Los arquitectos, además, explican en su escrito que la propuesta urbanística del anterior equipo de Gobierno «no justifica la necesidad de nuevas clasificaciones de suelo en base al estado de planeamiento vigente y el crecimiento demográfico de la ciudad». Por último, el colectivo afirma que la ordenación propuesta «crea una muralla de edificaciones en el perímetro de la ciudad, sin plantear un nuevo diseño de la periferia en la que se gradúe la relación con el entorno y su integración con los barrios tradicionales de la ciudad».
En total se tramitaron 8.788 alegaciones dentro de los plazos oficiales, de las que 150 corresponden a particulares y el resto, 8.539, a organizaciones, colectivos e iniciativas político-sociales, según los datos facilitados por Izquierda Unida. La coalición considera que es «técnicamente posible» resolverlas en dos meses, tal y como pidieron en Pleno los tres grupos de la oposición, ya que sólo 150 requieren una respuesta de los técnicos municipales, estima el concejal Francisco Guarido, mientras que el resto depende de criterios exclusivamente políticos.
Hasta finales de septiembre IU se ha propuesto contactar con las organizaciones y colectivos que han suscrito el grueso de las alegaciones, como el Foro Ciudadano, el Colegio de Arquitectos, Coag, Asociación para la Defensa del Paisaje o la Asociación de Vecinos de Olivares, a fin de darles a conocer el resto de propuestas y analizar el documento urbanístico de forma conjunta. Igualmente, Guarido ha anunciado que solicitará formalmente a la alcaldesa la convocatoria del Consejo Sectorial de Urbanismo para que opine y elabore un informe por escrito sobre las alegaciones y sobre el PGOU. En este consejo están representadas asociaciones de vecinos, sindicatos, empresarios y distintas organizaciones profesionales.
Francisco Guarido cree posible, «si los tres grupos políticos de la oposición mantienen la misma postura que tenían en el mes de mayo», que pueda salir adelante el PGOU «de los que más votos sumamos. Es nuestra oportunidad de conseguirlo, de meter la tijera y de que se acepten también alegaciones en positivo, porque el PP sólo quiere volver a lo que había en el año 2001». En el plazo de quince días o un mes como máximo, considera Francisco Guarido, el Ayuntamiento podrían tener listo el informe de las alegaciones para poder decidir qué hacer con el documento.
Entre las alegaciones, y junto a las presentadas por particulares y entidades, destaca también la del arquitecto Joaquín Hernández, que solicita que el PGOU establezca una mayor catalogación de edificios en la ciudad. Otro profesional, Francisco Pérez, pide en nombre de la Asociación de Alérgicos a Alimentos que se redacte un informe sobre la plantación de árboles en la ciudad y la relación con determinadas alergias, es decir un estudio de las especies alergizantes.
Por su parte la Comunidad de Regantes del Canal de San Frontis quiere que se mantenga la calificación de suelo rústico de especial protección en los terrenos comprendidos entre el cementerio y la autovía, ya que «están afectos durante cincuenta años al pago de las obras de modernización de regadíos ejecutadas sobre los mismos».
Curiosidades en las iniciativas de particulares y colectivos
Dirección Provincial de Educación
Entre las alegaciones presentadas a la última revisión del Plan General de Ordenación Urbana de Zamora está la que ha tramitado el director provincial de Educación y ex concejal de Urbanismo. Pero San Martín solicita en su escrito al Ayuntamiento que dos parcelas del CEI no se incluyan en la expansión del Campus Universitario Viriato.
Monasterio de Las Dueñas de Cabañales
La priora del Monasterio de Santa María La Real de Las Dueñas de Cabañales pide que el PGOU mantenga todo el conjunto actualmente delimitado por los cierres históricos y calificado como dotación comunitaria. El objetivo es, asegura, «conservar el convento tal cual para generaciones futuras, alejando del mismo cualquier tentación de actuación especulativa».
Azecop
La Asociación Zamorana de Empresarios de Construcción y Obras Públicas (Azecop) propone que las terrazas del Duero se califiquen como suelo rústico común, «única calificación actualmente compatible con la realización de actividades extractivas». De esta forma se amplía la zona de explotación geológica para materiales de construcción y derivados.
