La directiva del Zamora CF ha decidido posponer hasta, como mínimo, septiembre la asamblea ordinaria de socios, una cita que se iba a celebrar este mes de julio pero que se ha retrasado en el tiempo y ahora mismo no tiene fecha prevista.

Así lo ha podido confirmar este periódico, al igual que los motivos que han llevado a los responsables a tomar esta decisión, y todo se debe a que no tienen todavía cerrado el ejercicio económico 2015-16 y, por tanto, no conocen con exactitud plena la deuda con la que conviven en la entidad del Duero y que el pasado año cifraron en 308.000 euros a 16 de junio de 2015.

A falta de dar por zanjada la pasada temporada en materia financiera, en el club tampoco tienen cerrado el presupuesto que manejarán los próximos meses. En este sentido, los mandatarios han asistido a diversas reuniones en las instituciones con fin de conocer o, al menos, hacerse una idea de la subvención que recibirán la próxima temporada, pero ni Diputación ni Ayuntamiento han podido confirmar una cantidad exacta. Cabe recordar que la Institución Provincial hizo un esfuerzo el pasado verano y mantuvo la ayuda de 65.000 euros al Zamora CF a pesar del descenso a Tercera División con el fin de ayudar al club a recuperar la Segunda B, pero este año, al no haber conseguido el ascenso, sí sufrirá una merma en la subvención, algo que ya sucedió con el Ayuntamiento, para equipararlo a otros clubes.

Esta incertidumbre sobre el presente y el futuro económico ha llevado a los directivos a retrasar la fecha de su cita asamblearia, no así la campaña de socios que quieren presentar en los próximos días. Aunque no se conocen de forma oficial los precios que han estipulado y, de hecho, no se someterán a votación en asamblea, el presidente rojiblanco sí habló hace semanas de una obligada reducción en los costes. El objetivo es que los carnés estén en circulación la próxima semana, coincidiendo con el inicio de la pretemporada, y se tiene en mente la cifra del pasado año cuando se lograron alrededor de un millar de socios de pago. De este modo en la futura asamblea, que si se convoca para septiembre estará en el marco legal de los estatutos (trimestre siguiente al cierre del ejercicio: julio, agosto o septiembre) se someterán a votación las cuentas, deuda y presupuesto, y se presentará la campaña de socios con fin de que sea ratificada. Con estas decisiones se corre el riesgo de que los socios tumben el presupuesto o una campaña de captación que ya llevará tiempo en marcha, una circunstancia que también se vivió hace dos temporadas, aunque en aquel momento la asamblea dio luz verde a las decisiones previamente tomadas.