Si los partidos durasen solo 45 minutos, el Zamora C. F. hubiese cuajado ayer un encuentro muy completo pero no es así. A los locales les sobró la segunda mitad ante el Bupolsa de Burgos que dirigen los exrojiblancos Manu Cabezas y Pedro Pascual, y la realidad es que esa bajada de rendimiento de los de Balta fue por deméritos propios. El cuadro zamorano regresaba al Ruta de la Plata dispuesto a convencer y a recuperar su identidad, y lo cierto es que el inicio fue prometedor, no solo por el tempranero gol de Coque, sino por las buenas sensaciones que estaban dejando los futbolistas con jugadas trenzadas, fluidez y agresividad. Esas magníficas impresiones, que se complementaron con el segundo gol del día obra de Rubén Moreno (2-0), se vieron empañadas por una segunda mitad en la que las prestaciones disminuyeron.
Cierto es que los de Balta no pasaron demasiados apuros pero su fútbol ya no fue el mismo y las ocasiones para sentenciar, que sí las hubo, aparecieron más a cuentagotas. Además este encuentro se recordará por los dos penaltis fallados por los zamoranos, uno en cada tiempo, y es que primero Manu Moreira, que lanzó raso y centrado, y después Vílchez, que tiró fuera, erraron desde los once metros.
A esta mala fortuna hay que añadir la pequeña discusión que se creó entre los propios jugadores por decidir quién lo tiraba (anteriormente lo había hecho Edu Ruiz) y es que también Rubén Moreno quería hacerlo, aunque a partir de ahora será el entrenador quien lo designe directamente desde el banquillo puesto que la premisa hasta el momento era que lo hiciera el que mejor se encontrara.
Polémicas a un lado, lo importante es que este triunfo permite al Zamora C. F., al líder, mantener su ventaja de cinco puntos más golaveraje con la Gimnástica Segoviana, que ganó al GCE Villaralbo (3-1) lo que lleva a los azulones a salir de puestos de privilegio. Mientras, los rojiblancos se colocan ocho puntos por encima del Palencia que dio la sorpresa al perder contra el colista, el Becerril (2-1), mientras que La Bañeza recupera la cuarta posición tras vencer al Santa Marta (2-1) y está a 14 puntos de los zamoranos.
Por lo que respecta al encuentro disputado a mediodía, desde el primer instante el Zamora C. F. dejó claras sus intenciones. Buen fútbol, juego fluido y triangulaciones. Así, no tardó en llegar el primer tanto en el minuto 6 con una buena apertura de Coque hacia Moreira que centró para que, de nuevo Coque, la enchufara y pusiera a los suyos por delante.
Los rojiblancos fueron a por más y primero David Álvarez y después Rubén Moreno y Huertas encararon portería rival en un encuentro que se había convertido desde el pitido inicial en un monólogo zamorano. Hubo que esperar casi veinte minutos para ver la primera aproximación de los burgaleses y fue en una falta en la que apenas crearon peligro y es que hasta el momento Rodri estaba siendo un convidado de piedra en este partido que era su estreno en el Ruta de la Plata. La superioridad del Zamora C. F. era total y faltaba plasmarlo en el marcador, pero se erró en la mejor opción: un penalti que lanzó Moreira y que el meta burgalés detuvo, aunque ese fue el único punto negativo para el salmantino que cuajó una magnífica primera parte.
A partir de este momento las fuerzas parecieron más igualadas sobre el césped pero los visitantes desaprovecharon la mejor opción que tuvieron, que llegó a balón parado. Fue una buena falta a favor que botó Daba, Rodri tocó y se estrelló en el larguero. Quien, afortunadamente, no perdonó fue el pichichi, que estaba deseoso de reencontrarse con el gol y pudo hacerlo con un nuevo centro de Moreira, en este caso desde la derecha, que Moreno enganchó de forma perfecta para poner el 2-0 cuando restaban pocos minutos para el descanso.
El encuentro se reanudó sin cambios y con dos saques de esquina consecutivos para el Bupolsa y una falta que Daba lanzó de forma directa y Rodri detuvo sin problemas. Mientras, el Zamora C. F. lo intentaba a trompicones pero tuvo ocasiones para sentenciar; la mejor una de Moreno que quiso aprovechar la posición del meta que estaba adelantado, aunque Alex terminó por atrapar. El juego local no era, ni de lejos, tan fluido como en la primera mitad, aunque los zamoranos pudieron llegar en varias ocasiones a área contraria en busca de la guinda. De nuevo tuvieron la mejor opción para lograrlo e, igual que en la primera parte, erraron un penalti, en este caso Vílchez, cuyo disparo desde los once metros se fue fuera. No estaba siendo un segundo tiempo brillante y, aunque Rubén Moreno tuvo el tercero en un buen disparo que rechazó el meta, el Zamora C. F. se vio obligado a conformarse con un triunfo que debió ser más holgado.
