Nueva victoria del Zamora CF que demuestra semana a semana sus credenciales y merecimientos para acabar la Liga como primer clasificado, un puesto que ostenta desde hace muchas jornadas y cada vez con más distancia sobre sus perseguidores.

Este domingo, en esta ocasión a mediodía, el equipo de Balta volvió a dejar patente su superioridad al endosar un 0-3 a un Burgos Promesas que trató de hacer frente a los rojiblancos pero terminó por sucumbir.

El encuentro tuvo un inicio prometedor y eso se demostró cuando el Zamora CF conseguía poner las primeras distancias desde las botas de David Álvarez que no perdonó cuando apenas se cumplía el minuto 11 de partido. Sin embargo, los burgaleses no iban a vender baratos los puntos e intentaron poner las tablas.

De hecho los locales tuvieron opciones para hacerlo y fue Varo quien tuvo más cerca el empate pero ahí se encontró con Miguel quien rubricó una gran intervención, y acto seguido los locales desperdiciaron un saque de esquina que pudo salir muy caro a los rojiblancos.

Los de Balta se mostraron sólidos al repeler todas las aproximaciones rivales para irse al descanso por delante en el marcador, y eso que el local Óscar también pudo poner el empate con un buen remate que sacó la defensa zamorana en última instancia.

SENTENCIA

El encuentro se reinició con una mínima ventaja en el marcador pero los zamoranos no quisieron especular y en dos minutos sentenciaron.

La segunda diana rojiblanca se inició con una buena jugada de Vílchez que puso un buen balón entre líneas hacia Rubén Moreno y el pichichi sacó el mayor fruto al poner el 0-2 y reencontrarse con el gol que se le resistía desde hace varios encuentros.

El Promesas aún no se había recompuesto y Moreira sentenció con un gran gol que fue el 0-3 que podía darse por definitivo.

A partir de ahí, comenzaron los cambios en ambos banquillos y el Zamora CF mantuvo su superioridad sin renunciar a una cuarta diana que trató de conseguir.

El Burgos Promesas también buscó el tanto del honor pero Miguel también estuvo firme bajo los palos para dejar la portería a cero. Así se fraguó una nueva victoria de un equipo que parece no tener techo.

((HABRÁ AMPLIACIÓN))