Las largas jornadas de sol durante el verano pasan factura con el paso del tiempo provocando un envejecimiento prematuro de la piel o la aparición de manchas y, en el caso de que se produzca una quemadura, "la piel lo recordará toda la vida", ha comentado el cirujano estético, Moisés Martín Anaya.

Cuando terminan los meses de verano es necesario una revisión dermatológica, ya que con diez minutos de sol al día entre las 11 de la mañana y las cinco de la tarde se está expuesto a un peligro para la piel, ha señalado el doctor.

Tras las jornadas intensivas de playa y piscina, muy posiblemente la piel se empiece a descamar lo que indica una quemadura provocada por los rayos ultravioletas, ha explicado el especialista.

Por estos motivos es aconsejable visitar al dermatólogo, que podrá identificar una posible lesión cancerígena y poner solución antes de que avancen las células tumorales y empeore el diagnóstico.

Por otra parte, el doctor ha enfatizado en que se debe estar atento a determinados síntomas como ver que la mitad de un lunar no es igual que la otra mitad, tener irregularidad en los bordes de estos, colores rojizos, blanquecinos y azulados sobre lesiones de color negro o ver que el lunar ha aumentado de tamaño y mide más de seis milímetros.

Asimismo hay que tener especial cuidado con la aparición de los melanomas que suelen salir en los brazos y las piernas en el caso de las mujeres y, en el tronco, la cabeza y el cuello en los hombres. Los lentigos que aparecen con la edad, los lunares o nevus y los melasmas que son propios del embarazo, se abordan con "fórmulas estéticas".

El tratamiento láser, ha comentado el doctor Anaya, ha supuesto una gran solución sencilla e indolora, pero no en todos los casos consigue erradicar de forma completa la mancha o lunar, siendo en la cuarta sesión cuando se da el diagnóstico definitivo.

Otra preocupación que llega al final del verano es cómo combatir la sequedad, la descamación y conservar el bronceado. El cirujano ha matizado que los remedios caseros no aportan gran ayuda, pero que sin embargo si se aplica limón, pepino o yogur, la piel se hidratará y refrescará.

El tratamiento que recomienda es la exfoliación de la piel, que no elimina el bronceado y aporta una gran hidratación, renovando células, eliminando las muertas y favoreciendo a la producción de colágeno y la absorción del agua.