La mayoría de las personas cuidan su dieta especialmente antes del verano y las vacaciones, pensando en lucir el cuerpo que desean en la playa y en la piscina. Pero la alimentación es un tema importante durante todas las estaciones del año y en verano aún más.

Las altas temperaturas y los cambios de hábitos pueden trastornar el organismo, por lo que es esencial que mantengamos una dieta saludable. El experto en nutrición y autor de 'Tú eres tu medicina', Ata Pouramini, nos da unos consejos fundamentales para no descuidar nuestra alimentación en verano.

¿Qué comer en verano?

Durante las vacaciones es más probable comer fuera de casa, lo que complica mantener una dieta saludable al no saber qué elegir cuando se tiene el menú delante. Pouramini establece un menú ideal para cuando no se come en casa.

De primer plato sugiere una ensalada de hojas verdes, que refresca, hidrata, aporta minerales y vitaminas y no engorda. De segundo, y especialmente si las vacaciones son en la playa, se recomienda decantarse por las sardinas, los boquerones y la caballa. Este tipo de pescado azul, rico en omega-3, es beneficioso para el sistema nervioso y para el descanso, ayudando a dormir mejor.

¿Y de postre? En vez de un helado o un pastel, lo mejor es optar por unos trozos de piña natural. Se trata de un alimento diurético que ayuda a prevenir y paliar la retención de líquidos, un problema que se agrava en verano y especialmente en mujeres.

¿Picoteo sano?

Para evitar alimentarnos de aperitivos poco saludables o con un alto contenido en grasa, se recomienda llevar siempre encima un plátano. El plátano contiene hidratos de carbono y azúcar natural que proporcionan un subidón de energía. Además, sus altos niveles de potasio ayudan a regular los niveles de agua del organismo y a evitar la deshidratación.

Las pipas de girasol son otra de las opciones disponibles para picotear entre horas. Son ricas en vitamina E, que funciona como un potente antibacteriano y antivírico, fortaleciendo el sistema inmunitario. Además, es antioxidante, lo que ayuda a luchar contra el envejecimiento.

Los refrescos azucarados son un producto a evitar, principalmente porque favorecen la obesidad, no son saludables y no nos hidratan correctamente. Como sustituto, una botella de agua nos proporcionará la hidratación correcta y también ayudará a evitar el estreñimiento que pueden causar los cambios de lugar y dieta. Se recomienda llevar siempre una botella pequeña de agua encima, y si salimos de viaje con la familia, se puede optar por una botella de litro.

¿Qué comer en casa?

A la vuelta de las vacaciones se debe llenar la despensa de casa de alimentos ricos en fibra, como el arroz y la pasta integral, que también contribuyen a mantener unos niveles de glucosa estables y evitarán el picoteo entre horas.

Por otro lado, también es importante tener en la nevera frutas como el aguacate, el melón y la sandía. Estos tres alimentos favorecen la hidratación, algo muy importante en verano. El aguacate, rico en vitamina E, se puede tomar en ensaladas, siendo menos recomendable combinarlo con salsas. El melón y la sandía son ideales para los niños, ya que aportan vitamina C, que ayuda a mantener su sistema inmunitario sano y fuerte. El sabor dulce de estas frutas las convierte en un postre ideal para el verano.

Pouramini también recomienda el consumo de pechuga de pavo magra, que contiene un aminoácido triptófano responsable de la producción de la serotonina, la hormona responsable de la felicidad y el bienestar.