Los problemas de Belén Esteban han hecho una vez más mella en su salud. La colaboradora de Sálvame se ha enfrentado esta semana a su paso por la casa de Gran Hermano VIP donde ha revivido el trauma que le dejó su paso por la anterior edición.

Un complejo que persigue a Belén un año después y que ahora se une a sus problemas judiciales con Toño Sanchís. Y es que el periodista Saúl Ortiz ha afirmado en Es Diario: "Me insisten en que un hermano de Belén ya ha salido a relucir en las últimas conversaciones que Toño ha mantenido con su representante legal". Unas palabras que llenaron de rabia e indignación a la Esteban que se encontaba fuera de plató pero decidió entrar.

Con rostro cansado y unas heridas visibles en la boca, Belén aseguraba que sus llamativos herpes labiales se debían a "todos los disgustos que me llevo en Sálvame. Por eso, me las he tenido que explotar". A esto sumó su advertencia a su exrepresentante: "Toño se refiere a mi hermano Cuqui. Él para decir esto lo tendrá que demostrar porque yo si que puedo demostrar lo que he dicho. Es mentira lo que dice. No puedo hablar pero yo tengo mis papeles y tengo claro que como siga así va a seguir desfilando gente. Él ha engañado a mi hermano. Mi hermano iba al gestor que era amigo suyo y le decía que estaba todo bien, que estaba todo pagado. No quiero hablar. A Saúl le informa Toño Sanchís. Pero en vez de mandar a gente hablar, habla tú. Da la cara. Yo tengo toda esa documentacion pero no puedo hablar".

Una auténtica declaración de intenciones que remató diciendo: "¿Te pido por favor que pares Toño porque se puede liar, no lo lies más ¿Por qué se ha ido Amparo también de la oficina? ¿Por qué? ¿Y la íntima amiga de Lorena a Brasil? ¿Por qué?".