Son una de las parejas más seguidas de nuestro país aunque siempre han preferido evitar la prensa y mantener su vida personal en lo privado. Por eso la sorpresa ha sido mayúscula al ver las fotografías que ha compartido Iker en su cuenta de Instagram.

La imagen de Sara muestra a una niña de unos tres añitos sentada en un sofá con los mismos ojos azules que le conocemos hoy. De hecho, el portero ha acompañado la foto sencillamente del emoticono de una rana, haciendo una broma en referencia a sus grandes ojos. La pequeña Sara lleva un peto vaquero y un gracioso peinado y es imposible no reconocerla.

"Lo sé, comía un poquito más de la cuenta", escribió el futbolista junto a su imagen. En ella se ve a Iker con un rostro más rollizo del que le conocemos a la edad de ocho años aproximadamente. Con cara de niño bueno, mira directamente a la cámara en lo que parece una fotografía tomada para el cole.

Está claro que la feliz pareja ha querido acercarse a sus seguidores mostrando un pedacito de su infancia para mostrarse un poco más familiares a sus fans. Seguro que están disfrutando con la enorme cantidad de comentarios y 'likes' que tienen sus graciosas fotografías.

Y es que aunque a veces parezcan lejanos y distantes, es una pareja de lo más normal que disfrutan mirando álbumes antiguos, como todas las familias.