Científicos del Centro de Regulación Genómica (CRG), la Universitat de Barcelona (UB) y la empresa de investigación Starlab han desarrollado un sistema que convierte las ondas cerebrales en sonido, un sistema pionero que "da voz" en tiempo real a las personas con discapacidad que no pueden comunicarse por si solas ni con otras herramientas.

La mayoría de sistemas de traducción de señales actuales necesitan control motor por parte del paciente, por ejemplo, siguiendo el movimiento de la retina en los ojos, por lo que los discapacitados con espasmos y los que no consiguen controlar ningún aspecto motor quedan excluidos y no pueden utilizarlos. Además, muchos de estos dispositivos, hasta ahora, no permiten un análisis en tiempo real de las expresiones y requieren un postprocesado de la información, por lo que pasa un periodo desde que el usuario ha emitido la señal hasta que se traduce.

El aparato, denominado "Enobio Helmet", ahora desarrollado es el único que consigue crear sonido en base a las emociones. Lo consigue mediante señales de electroencefalografía, cardíacas y musculares, sin que requiera sin control motor por parte del paciente. Pero lo más reseñable es que la transmisión de la información se hace en tiempo real.

La aplicación se basa en un casco que mide los impulsos y un software que los traduce y ya se ha probado con dos pacientes con parálisis cerebral, de quienes no se sabía ni siquiera si eran capaces de comprender lo que sucede a su alrededor.

Según ha explicado Marcos Quevedo, investigador de CRG-IMIM, este sistema, que se está desarrollando desde marzo, ha sido ensayado con dos pacientes con discapacidad cerebral. Ambos han logrado comunicarse.

La iniciativa se presentó ayer por la jefe del proyecto "Brain Polyphony", Mara Dierssen; la responsable de Asuntos Científicos e Internacionales del centro, Michela Bertero; el investigador del Barcelona Research Art & Creation de la UB, Efraín Foglia, y el investigador de Starlab David Ibáñez. Éste último ha concretado que el sistema es capaz de medir dos parámetros emocionales, el "valance" y el "arousal", que miden si un sentimiento es agradable o desagradable y si es excitante o tranquilizante.

"Enobio Helmet" se coloca en la cabeza con neurosensores y medidores cardíacos que transmiten los impulsos eléctricos del cerebro, los latidos y la actividad muscular a un ordenador, que analiza la reacción emocional en tiempo real en función de unos parámetros previamente establecidos. Si el sistema detecta señales cerebrales muy elevadas de "arousal" y neutras de "valance", traducirá que el paciente con parálisis cerebral está sorprendido, algo que le podrá ayudar a comunicarse con su entorno, al mismo tiempo que facilitará la labor de los cuidadores. Según la intensidad de las ondas cerebrales, el ritmo cardíaco, su variación o la actividad muscular, el aparato mide si una persona que no puede expresarse ni verbal ni físicamente siente emociones positivas (felicidad) o negativas (tristeza o enfado) en mayor o menor intensidad.

Por su parte, David Ibáñez, de Starlab, ha expresado la voluntad del equipo de "democratizar el proyecto y hacer uso de esta tecnología en un entorno real" para que la gente pueda utilizarlo en su casa.

El investigador del Barcelona Research Art & Creation de la UB, Efraín Foglia, ha afirmado incluso que este sistema podría llegar a suplantar al cuidador físico de los pacientes con discapacidades, ya que "si el paciente es capaz de controlar respuestas básicas entonces puede llegar a modelar su entorno".

"Brain Polyphony" se trata de un proyecto piloto que cuenta con un año vista para ser desarrollado y aplicado a 15 pacientes más para comprobar su rendimiento, tras el cual esperan poder disponer al menos de un aparato que funcione a pleno rendimiento.

Mara Dierssen ha explicado que este sistema que podría aportar "tanto bien" es producto de la unión de tres mundos ya existentes, "la sanificación, la tecnología relacionada con "computer interface" y la neurociencia más básica" y que lo novedoso de la iniciativa es que han juntado campos que hasta ahora no habían se habían planteado como compatibles.