La ermita del Cristo de las Batallas de Toro permanece inscrita en el Registro de la Propiedad a nombre del Ayuntamiento de Toro, aunque también es uno de los bienes incluidos en el inventario municipal. De esta manera, el alcalde de Toro, Tomás del Bien, ha respondido al PP que, recientemente, ha criticado que, después de tres años de Gobierno, no haya resuelto todavía el recurso presentado por el PSOE sobre la propiedad de la ermita. Precisó Del Bien que el grupo socialista no ha olvidado su oposición frontal al "deseo" del actual portavoz del PP, José Luis Prieto y de los concejales del anterior equipo de Gobierno, de "regalar" la ermita del al obispado de Zamora, "en claro perjuicio para los toresanos", a la vez que subrayó que en este asunto "nada ha cambiado con repercusión legal", porque el templo "sigue estando inscrito en el Registro de la Propiedad a nombre del Ayuntamiento".

Además, matizó que no ha sido ejecutado el acuerdo adoptado por el Pleno basado en dar de baja la ermita del inventario de bienes municipales y recordó que en marzo del 2016, también en sesión plenaria, fue aprobado el nuevo inventario del que forma parte el templo en la categoría de Bienes Históricos, por lo que no fue ratificada la exclusión que acordaron los populares. De otro lado, el alcalde restó importancia al hecho de que en el Catastro la ermita figure a nombre del Obispado, porque "la presunción legal de propiedad solo la otorga la inscripción en el Registro de la Propiedad". En este punto, remarcó que el acuerdo de pleno por el que el PP pretendía ceder la propiedad de la ermita, tan solo implicaba la "baja" del inmueble del inventario de bienes municipales, inventario que, como aseguró la Secretaria General en un informe emitido en marzo de 2015, "es un mero registro administrativo y como tal por sí solo ni prueba, ni crea, ni constituye derecho alguno a favor del Ayuntamiento", pese a lo cual, el inmueble sigue formando parte de este documento. Del mismo modo, recordó que para adoptar su decisión sobre la ermita, el PP no esgrimió "razones legales sino simples creencias o convicciones personales, tal y como consta en un escrito firmado por el anterior alcalde", aunque también recordó que los populares impidieron el inicio de un expediente de investigación, como recomendaron los técnicos municipales.

Esta decisión evidencia, para Del Bien, que "parece que había prisa por desprenderse de la propiedad de la ermita y entregársela al obispado". Por otra parte, el alcalde anunció que, como el citado acuerdo de pleno "era y sigue siendo ilegal y gravemente lesivo para los intereses del municipio", el equipo de Gobierno socialista proseguirá, en base a los informes jurídicos existentes y a otros que se puedan aportar, las actuaciones precisas para anular el acuerdo "que perjudicaría a los toresanos y que beneficiaría, de forma caprichosa y sin fundamento legal suficiente, al obispado". De hecho, a su juicio, el anterior equipo de Gobierno incurrió en una "clara dejación de funciones, porque su deber era defender los intereses de Toro y no los del obispado". Por último, anunció que antes que concluya el mandato "el asunto estará zanjado" y que será anulado el acuerdo de los populares sobre la propiedad de la ermita.