El hotel Juan II de Toro acogió durante la mañana de ayer la primera sesión de las Jornadas de Agricultura y Ganadería Ecológicas organizadas por la Diputación. En esta ocasión, la conferencia informativa ofrecida en la ciudad de Doña Elvira versó acerca de las explotaciones de pistachos, un cultivo en alza durante las últimas temporadas. El gerente de Omnia Pistacho, Julián Guerrero, impartió un seminario sobre el fruto seco, su metodología de cultivo y las vicisitudes relacionadas con su producción. En esta ocasión, la jornada contó de una parte teórica, en la que el Guerrero disertó sobre los principales aspectos relacionados con la siembra de este cultivo, y una parte teórica, donde el experto pistachero desgranó los secretos acerca de la técnica de poda de los árboles frutales que producen el pistacho. Todo el evento contó con la colaboración de Naturduero, cooperativa local centrada en este producto desde hace un año y medio.

En la siembra y producción de pistacho hay una cuestión clave: hablamos de un cultivo lento. Es decir, desde que las explotaciones echan a andar, hasta que los árboles comienzan a dar frutos transcurre una media de 5-6 años, periodo que requiere de un gran proceso de inversión previo y, por supuesto paciencia.

En cuanto a la cuestión ecológica, temática nuclear de estas jornadas organizadas por el organismo provincial, destacar que las explotaciones ecológicas de pistacho producen menos que las que utilizan elementos químicos en su desarrollo, como los fungicidas utilizados para combatir las plagas de hongos, pero su precio de mercado compensa ese déficit de producción. En cuanto a la climatología, el aspecto más destacable del pistacho es su capacidad para aguantar periodos de poca agua o semisequía.

Por otra parte, es un cultivo que requiere temperaturas frías en invierno (al menos 1.500 horas al año) y todavía más calor (3.000 horas en verano). De no alcanzar estos requisitos, se corre el riesgo de que el fruto no llene su cáscara al completo, de forma que aparezca cerrado; aspecto a evitar, ya que los precios pueden mermar hasta en 3 euros en caso de los frutos que no han conseguido abrir.

Tras la sesión teórica, los agricultores allí reunidos se desplazaron hasta una parcela de un socio de Naturduero. Una vez allí, Julián Guerrero mostró a los cultivadores cómo debe realizarse correctamente el proceso de la poda del pistachero.