El Ayuntamiento de Toro sigue a la espera de que la familia de Jesús López Cobos, fallecido el pasado viernes, concrete los detalles del traslado de los restos mortales del director de orquesta y pueda ser enterrado en su ciudad natal. En principio, estaba previsto que la familia de López Cobos retomara ayer los trámites burocráticos para materializar el traslado del cuerpo desde Berlín hasta Toro, paralizados durante el fin de semana. Por su parte, el Ayuntamiento ya tiene preparado el salón de plenos para que, cuando se produzca la llegada del cuerpo, se pueda abrir la capilla ardiente, en la que todas las personas que lo deseen podrán despedir al maestro. Aunque en el día de ayer finalizaron los tres días de luto oficial decretados por el Ayuntamiento, las banderas ondearán a media asta el día del funeral.