Todavía falta un mes, pero el ambiente del domingo "gordo" de Carnaval ya se deja sentir por alguno de los rincones de la vetusta ciudad de Toro. Telas, bailes, herramientas, carrozas, maquillaje?Todo se pone a punto para recibir una de las festividades más apreciadas por los habitantes de la casa de Doña Elvira y, también, una de las celebraciones que más afluencia de público exterior arrastra consigo. "Las Domingueras", una de las peñas carnavalescas más famosas del municipio, representan con fidelidad el arquetipo de las organizaciones culturales locales que se echan a las calles durante las lupercales. Su preparación, tradición y sentimiento sirven de ejemplo para explicar la importancia y magnitud que ha alcanzado esta festividad pagana en la casa de la Colegiata.

Antiguamente, tal y como cuenta Jonathan Ramos -uno de los integrantes más jóvenes de la formación-, el domingo de carnaval no gozaba del prestigio actual. Con el objetivo de animar las tardes de la jornada dominical, un grupo de amigos de la ciudad decidieron, hace ahora 28 años, disfrazarse con motivos de celebración nupcial (maridos y esposas por igual). La iniciativa fue más que bien recibida y pronto, fruto de la gracia natural de los vecinos locales, el sobrenombre de "Las Domingueras" se convirtió en un título oficial y una declaración de intenciones; ya que todos los años este grupo de colegas se visten con atuendos femeninos parad disfrutar de los festejos carnavalescos.

Ahora, "Las Domingueras" cuentan con 21 miembros y están conformados como Asociación Cultural. El acceso a la agrupación es extremadamente exclusivo, y como si de una herencia se tratase, la prerrogativa para poder entrar se concede de padres a hijos (mayores de 18 años). Los fuertes lazos que unen la peña no solo se limitan a los días en los que toca travestirse, sino que cada uno de los miembros paga una cuota anual, acude al local de forma asidua, cena cada segundo jueves del mes y participa en el viaje que cada año realizan todos los integrantes de la formación. "Más que una peña, somos una hermandad", afirma Jonathan Ramos.

Además de la relación entre los miembros, la asociación se caracteriza por ser una de las agrupaciones de Carnaval que más empeño ponen sobre su puesta en escena. Cuentan con una carroza propia, los trajes los elaboran a mano familiares de los miembros y cada año contratan a un profesional de baile para que les ayude a desarrollar una coreografía acorde a la temática elegida. Temática que, por otro lado, se mantiene en absolutos secreto hasta la llegada del Domingo "gordo", cuando los 21 miembros de "Las Domingueras" lucen su performance.

A pesar de que todavía faltan cuatro semanas para el día D, es fácil notar la emoción en la voz de Jonathan Ramos cuando habla del Carnaval: "Tengo todas las fiestas de Toro muy arraigadas, pero el carnaval tiene algo especial".