Hace nueve años, su vida cambió para siempre. Lejos de rendirse, la toresana Rosa Riesco sigue luchando para encontrar una respuesta a la desaparición de su hijo, Pedro Matías Sánchez Riesco, el 26 de marzo del 2009 en Gijón. Por su entrega, valor y fuerza para levantarse ante circunstancias personales que dejan una huella imborrable, valores que Riesco intenta transmitir a otras personas y a otras familias que padecen el mismo sufrimiento, la asociación Sosdesaparecidos ha decidido que el nuevo "Premio a la Esperanza" lleve su nombre.

Con este galardón, la asociación pretende rendir un homenaje a todos los familiares que han sufrido y sufren por la desaparición de un ser querido, distinción que recibe el nombre de una madre que, de forma ejemplar, sigue luchando cada día y sin descanso para encontrar a su hijo. De hecho, para la asociación Sosdesaparecidos, la toresana Rosa Riesco "encarna la figura de una madre que día a día mantiene esa lucha", aunque también es capaz de transmitir ánimo y de ayudar a otras personas que también intentan sobreponerse a la desaparición de un ser querido.

Y es que, como precisó la asociación, "Rosa Riesco alimenta a las familias dándoles esperanza y es un ejemplo en todos los sentidos" y el premio que lleva su nombre "supone un elogio a la entrega y valentía de las familias que se han visto privadas de la presencia de un ser desaparecido".

Con el "Premio a la Esperanza Rosa Riesco", Sosdesaparecidos pretende reflejar un sentimiento que une a la vida a las personas que sufren por tan importante pérdida y que "construyen en su corazón un altar donde solamente existe el amor y donde queda totalmente apartado el egoísmo, la venganza, el odio, la decepción y la amargura".

Este premio será entregado a lo largo de este año y será concedido a una persona o entidad que represente los valores del galardón. El presidente de la asociación, Joaquín Amills comunicó recientemente a Riesco la decisión adoptada por unanimidad por Sosdesaparecidos y, para esta mujer nacida en Toro supone un "orgullo" que el "Premio a la Esperanza" lleve su nombre, porque "llevo muchos años luchando". Aunque para Riesco "hay muchas personas que merecen este reconocimiento", la asociación ha puesto sus ojos en la lucha de esta toresana que, en lugar de hundirse y resignarse, sigue luchando por encontrar a su hijo, aunque también es capaz de transmitir ánimo a otras personas con las que comparte un sufrimiento que intenta paliar con palabras de esperanza.

"No nos podemos venir abajo", destacó Riesco quien ha encontrado en las personas que forman parte de la asociación una familia a la que se siente muy unida y a la que felicita cuando uno de sus miembros logra encontrar a la persona desaparecida y a la que acompaña en su dolor cuando el final es el que nadie espera. El "gesto" de la asociación, ha supuesto para Riesco un nuevo aliciente para seguir luchando, superar cualquier adversidad y, sobre todo, para no derrumbarse ante los recuerdos, la nostalgia y la ausencia de un hijo que siempre llevará en el corazón.