Subida de impuestos, pérdida de subvenciones o la ausencia de medidas para frenar la despoblación. Estas premisas, entre otras, justifican que el PP de Toro haya realizado un balance negativo del 2017 que, a su juicio, "no ha sido un buen año, ni para la ciudad ni para los toresanos". Los concejales populares apoyan esta valoración en razones como que, en Toro, se pagan más impuestos y, como ejemplo, citó que con el cobro del IBI el Ayuntamiento recauda anualmente 650.000 euros más o el aumento que han experimentado tasas como la de basuras o la correspondiente a la utilización de las instalaciones deportivas, servicios por los que "los toresanos tendrán que pagar más". Criticó la oposición que el pasado año también se caracterizó por la pérdida de subvenciones para la rehabilitación del Alcázar o la correspondiente al Plan Municipal de Obras, al margen de la concedida para las obras del puente de piedra valorada en un millón de euros y de la que se han dejado de ingresar 250.000 euros, por "una pésima redacción de los pliegos de condiciones que aprueba el alcalde o la Junta Local de Gobierno". Para los populares, el 2017 también se caracterizó por ser un año en el que cerraron "malos acuerdos" con otras administraciones, tales como el relativo a la "cesión a coste cero" de la travesía de la N-122, que ha supuesto que el Ayuntamiento dejara de ingresar 120.000 euros aunque también deberá hacerse cargo "para siempre" de su mantenimiento.

Sobre la citada travesía la oposición también criticó las actuaciones ejecutadas recientemente basadas en la adecuación de "dos especie de rotonda" y en pintar "rayas", aunque "nos venden la intervención como inversiones en seguridad". Por otra parte, la oposición valoró de forma negativa algunas obras que se han ejecutado en la ciudad como en el caso de la calle San Lorenzo, trabajos que se iniciaron sin el permiso de la Comisión de Patrimonio, que se han ejecutado por fases propiciando que la vía haya permanecido varios meses cortada y con un acabado que "no es digno del casco histórico de Toro". Sobre este proyecto, el PP precisó que será necesario acometer una nueva fase para arreglar las aceras y adecuar un pavimento acorde a la zona, lo que conllevará "volver a cerrar la calle y volver a gastar más dinero". Durante el 2017, como apuntaron los populares, la ciudad también ha perdido servicios que "no se han vuelto a recuperar", en alusión a la piscina climatizada que continua cerrada o a Radio Toro, aunque también cuestionaron que desde el Ayuntamiento se "invitara" a la empresa Softoro a abandonar la ciudad.

El PP también se refirió a la pérdida de población de Toro que, en la actualidad, cuenta con menos de 9.000 habitantes, aunque "el Ayuntamiento sigue sin hacer nada al respecto". En este punto, recordó que en el presupuesto aprobado para este año no se ha incluido ninguna medida para luchar contra la despoblación, tales como el aumento de las ayudas a la natalidad o medidas vinculadas a la formación de los jóvenes, el apoyo a emprendedores y otras que permitan favorecer el crecimiento del tejido industrial de Toro. Sin embargo, como precisó, hace pocos meses la CEOE denunció el "bloqueo" del área Obras con más de 35 proyectos parados. Por último, destacó que, en 2017 ha realizado una "oposición constructiva", con propuestas y mociones que ha presentado en los plenos y, para el nuevo año, los populares, se marcan como objetivo seguir trabajando para "recuperar la confianza de los toresanos".