Los padres son una parte fundamental en la experiencia de aprendizaje de sus hijos, pero no solo fuera del ámbito escolar sino como parte activa y dinámica de la educación integral de los alumnos. Bajo esta premisa, el Amor de Dios de Toro ha impulsado el programa "Aulas abiertas" con el que pretende que los padres se impliquen, apoyen y participen en las actividades organizadas por el colegio y que "repercutirá de forma beneficiosa en la forma en que sus hijos e hijas ven el centro, transmitiéndose la idea de que es un lugar donde compartir experiencias y aprendizajes con sus progenitores".

Para conseguir este objetivo, el colegio Amor de Dios ha decidido apostar por las "Aulas abiertas", un proyecto en el que las familias pueden pasar tiempo con sus hijos, mientras éstos aprenden en el centro. Responsables del colegio destacaron que la metodología de esta iniciativa se basa en favorecer la realización de actividades que permitan la inclusión de los progenitores en las aulas.

Una de las experiencias organizada en el marco de este programa es "Invertecuarto", proyecto en el que los alumnos de 4º de Primaria realizan maquetas de invertebrados que, posteriormente, tienen previsto exponer en el colegio. Para realizar estas maquetas de invertebrados, el centro invitó a los padres y madres a regresar a las aulas para trabajar codo con codo con los alumnos y, como indicaron responsables del Amor de Dios, "la respuesta fue gratamente positiva ya que hubo una alta participación de padres". Del mismo modo, destacaron que los alumnos vivieron la experiencia "con alegría" y disfrutaron de un actividad conjunta con sus padres en el entorno en el que "pasan horas aprendiendo", a la vez que resaltaron que "el ambiente dentro del aula era dinámico, con una gran interacción de todos, ayudando en los diferentes grupos de trabajo", para alcanzar un objetivo común.

Por otra parte, responsables del colegio toresano han valorado de forma positiva la implicación de los padres en esta iniciativa y precisaron que los alumnos podrían, dentro de unos años, recordar con cariño esta experiencia compartida con sus progenitores, ya que "muchas anécdotas se podrán transmitir a lo largo del tiempo". Por último, remarcaron la importancia de que un colegio, en este caso el Amor de Dios de Toro, pueda generar este tipo de vivencias que, además, sirven para motivar al centro y para mantener la apuesta de implicar a las familias de los alumnos dentro del ámbito escolar.