Las hermanas del Monasterio Premostratense de Santa Sofía en Toro celebraron ayer la solemnidad de San Norberto, fundador de la Orden, y dieron un paso más en su objetivo de conseguir que la imagen de Jesús atado a la columna" pueda quedarse, de forma definitiva, en el convento. En una jornada muy especial para las religiosas, la toresana Mari Carmen Ramírez Polo, recogió por la mañana la mantelería, de manufactura artesanal, sorteada con el fin de recaudar fondos para que Jesús atado a la columna"" no abandone el monasterio. Dos papeletas adquirió Ramírez Polo para esta rifa, unas de las cuáles contenía las cuatro últimas cifras del primer premio del sorteo de la Lotería Nacional celebrado el pasado 1 de junio. Una compañera le ofreció la posibilidad de participar en el sorteo y la afortunada no se lo pensó dos veces, porque lo importante "era colaborar con una buena causa", como ayudar a las religiosas en su afán de conseguir que una de las piezas que formaban parte del retablo mayor de la iglesia del convento, y que tuvieron que vender después de la Guerra Civil porque no tenían para comer, pueda quedarse en el monasterio. Destacó Ramírez Polo la "belleza" de la mantelería que ayer le entregaron las Sofías y que tiene en mente estrenar aunque, en un futuro, se la regalará a su hijo.

En unos días, las religiosas harán público el dinero que han recaudado con la venta de papeletas para este sorteo, así como las cantidad obtenida de donaciones particulares y que, íntegramente, destinarán a intentar adquirir la imagen. La galería de arte madrileña Caylus es la actual propietaria de la pieza que la cedió al monasterio el pasado mes de junio por seis meses, aunque posteriormente amplió el plazo de cesión medio año más. Las religiosas desean que la talla dorada y policromada, realizada por Sebastián Ducete y datada en 1605, pueda "quedarse en casa".

Ya por la tarde, el convento celebró la solemnidad de San Norberto, con una eucaristía oficiada por el párroco local, Roberto Castaño, en la que numerosos vecinos arroparon a las religiosas. En su homilía, Castaño destacó que San Norberto fue "ejemplar" en todas las etapas de su vida y que inculcó a las Sofías la necesidad de que la Iglesia se renueve y que "no hay otra ley en el mundo que no sea la del amor".