Es sin duda el monumento más emblemático de la ciudad y, desde hoy, la Colegiata abre al turismo su torre-campanario, estancia que las parroquias de Toro han convertido en un museo, tras realizar una inversión que ronda los 50.000 euros. La inauguración de la apertura de la torre-campanario de la Colegiata a los visitantes tendrá lugar en la mañana de hoy, a las 12.00 horas y, para las parroquias, supone un "acontecimiento que marcará un antes y un después para la ciudad y su patrimonio histórico-artístico". Los trabajos de adecuación como espacio museístico de la torre-campanario del monumento se iniciaron el pasado mes de marzo, después de que la Comisión Territorial de Patrimonio diera luz verde al proyecto ideado por las parroquias. Así, en las últimas semanas, las parroquias han acometido los trabajos de iluminación de los diferentes cuerpos de la construcción y han "amueblado" los espacios expositivos, con el objetivo de poner en valor la torre del monumento.

Los visitantes que, a partir de hoy, quieran disfrutar de este nuevo recurso turístico podrán acceder, a través de una escalera de caracol conformada por un total de 138 escalones, a las tres salas habilitadas para la exposición. En el primer cuerpo de la torre, los visitantes podrán admirar el centro de interpretación de la construcción del templo, situado en la antigua casa del campanero, en el que se explican la planimetría, las herramientas y oficios que intervinieron en la edificación de la Colegiata o las marcas de los diferentes canteros, además de visionar un vídeo explicativo. En el segundo cuerpo de la torre, los visitantes accederán a la "sala del reloj", en la que podrán conocer la maquinaria del reloj del templo que data del año 1785 y que se conserva en perfectas condiciones, aunque también podrán disfrutar de unas impresionantes vistas del cimborrio de la Colegiata.

En el último piso o "cuerpo de campanas", los visitantes podrán admirar, a corta distancia, las once campanas del templo y una vista panorámica de la ciudad y de la vega del río Duero, desde el punto más alto de Toro. Para materializar este proyecto, las parroquias han contado con la colaboración de distintos profesionales, coordinados por el aparejador Javier Vila Tejero, y el asesoramiento del arquitecto Claudio Pedrero Encabo. El acceso a la torre-campanario de la Colegiata está incluido en la entrada general del templo. Por otra parte, las parroquias confirmaron ayer que, para los ciudadanos de Toro, la entrada será gratuita, aunque por las dimensiones de la torre y las dificultades de acceso, las visitas se limitarán a los días laborables, ya que los fines de semana y festivos concentran la mayor afluencia de visitantes.

Al margen de la apertura de la torre, las parroquias también han puesto en marcha este año el proyecto "Toro Sacro", un nuevo formato de visita turística que permite a los viajeros descubrir cinco destacadas iglesias, en la que el arte actúa como elemento evangelizador.