"No pagamos impuestos. Gracias". Esta frase, junto a un dibujo obsceno, ilustra la última pintada realizada en uno de los muros de la Colegiata de Toro, acto vandálico que los párrocos han denunciado ante la Policía Local, que ya ha iniciado la preceptiva investigación para tratar de identificar al autor o autores. Sobre esta nueva pintada, que se suma a las realizadas en las últimas semanas en otros monumentos, el alcalde, Tomás del Bien, reconoció que, en esta ocasión, "se ha atentado contra la Colegiata" y que, tras la denuncia formulada por los párrocos, la Policía Local tratará de localizar a los responsables, aunque reconoció públicamente la "dificultad" que entraña intentar identificar a los vándalos, porque "actúan con nocturnidad y alevosía".

No obstante, mientras se recaban datos sobre este último hecho, el Ayuntamiento ha encargado a operarios del servicio municipal de limpieza que procedan a eliminar la pintada de uno de los muros de la Colegiata, trabajos en los que también colaborarán hoy los bomberos de Toro y que se extenderán a otros edificios de la ciudad que también han sido objeto de actos vandálicos. En este punto, Del Bien recordó que en las últimas semanas se han realizado pintadas en una "casa noble" de la plaza del Concejo, la iglesia de San Salvador o un edificio de la avenida Villachica. De hecho, como apuntó, otros monumentos también han sido objeto de actos vandálicos, tales como el Alcázar, el convento de Santa Clara, la iglesia de Santo Tomás Cantuariense o el Arco del Reloj.

Por otra parte, el alcalde anunció ayer que, en próximas semanas, el Ayuntamiento de Toro impulsará una campaña de concienciación sobre actos vandálicos y la protección del patrimonio. En el marco de esta iniciativa se organizarán charlas, aunque también se distribuirá cartelería y, con toda probabilidad, se trasladará a los colegios. Para poner en marcha esta campaña, el Ayuntamiento solicitará colaboración a la Asociación Ciudades Patrimonio de la Humanidad que "es pionera en cuestiones relacionadas con el tema de la concienciación y la protección de los monumentos contra el vandalismo". De otro lado, Del Bien aseguró que este tipo de actos vandálicos son "un lacra social" y que, desde la administración, es preciso intentar erradicar los daños que provocan en el patrimonio y velar por "mantener el decoro de la ciudad". En este punto, recordó que el pasado año un elevado número de propietarios recibieron un requerimiento para adecentar fachadas en el casco histórico, compromiso que asumieron muchos vecinos, mientras que otros se dedican a "atentar" contra un patrimonio tan valioso como la Colegiata.