Medio centenar de empleadas de Eulen que desempeñan su trabajo en la fábrica toresana Quesos del Duero de García Baquero, serán despedidas en breve, después de que a finales de este mes finalice la relación entre la empresa de trabajo temporal y la fábrica. El convenio de las trabajadoras no recoge la subrogación de sus contratos y, por tanto, la nueva empresa que se encargará del envasado, embalaje y empaquetado en la fábrica, Randstad, no tiene obligación de mantener a las empleadas en plantilla. El secretario general de la Federación de Servicios de Movilidad y Consumo de Zamora (FeSMC) de UGT, Javier del Río Ortega, explicó ayer que, a primeros de enero, Eulen, comunicó a los representantes de a plantilla su intención de iniciar un procedimiento de despido colectivo para las empleadas adscritas al servicio de envasado, embalaje y empaquetado, por la finalización del contrato de prestación de servicios a Quesos del Duero.

Al parecer, como matizó el dirigente de UGT, la firma quesera y Eulen llevaban varios meses negociando la renovación del contrato aunque, en principio la empresa quesera "no debía estar satisfecha con los estándares que ofrecía la subcontrata y sí con el trabajo desempeñado por sus trabajadoras". De las 50 empleadas que dependen de Eulen, que en "picos" de producción pueden llegar a 75, alrededor de 25 tienen un contrato indefinido y en el resto de los casos, los contratos oscilan entre unos días de duración y varios meses, en condición de temporales. A finales de este mes, la empresa Randstad empezará a prestar los servicios que hasta ahora ofrecía Eulen, por lo que las trabajadoras serán despedidas, al no recoger su convenio la subrogación de sus contratos y, por tanto Randstad podrá contratar a su propio personal. Así, las trabajadoras de Eulen "se irán a la calle con veinte días por año y su estabilidad laboral, aún con un trabajo precario, se acabó", apuntó Del Río. Por otra parte, subrayó que el periodo de consultas se inició el 23 de enero y que tendrá una duración máxima de treinta días. La intención de la mesa de negociación es poder mantener una reunión con Quesos del Duero, aunque, "su vinculación con las trabajadoras de Eulen es nula y ha declinado la opción ofrecida". No obstante, Del Río pidió a la empresa quesera que reconsidere su postura y que "aporte una salida" para las trabajadoras.