La Fundación González Allende inauguró ayer en la Casa de Cultura una exposición en la que exhibe parte de los bienes culturales adquiridos en los últimos 25 años, con el objetivo de ampliar el patrimonio de Toro y de recuperar obras de arte que, en tiempos difíciles como los de la posguerra, fueron vendidos por la Iglesia y por particulares. Esta muestra también tiene un fin solidario, ya que recaudará donativos para la Asociación de Alzhéimer de Zamora y que serán destinados a materializar el proyecto de adecuación de un centro asistencial para enfermos en el palacio de Valparaíso. El presidente de la Fundación González Allende, José Navarro Talegón, recordó que uno de los fines prioritarios de la entidad es salvaguardar el patrimonio cultural de Toro, aunque también trata de aumentarlo con la adquisición bienes, prestando especial atención a aquellas obras que pertenecieron a iglesias y monumentos de la comarca, y con la restauración de otras que, de no ser por la intervención de la Fundación, podrían haber quedado relegadas al olvido. Entre otras piezas adquiridas en los últimos años y que ahora se exhiben en la Casa de Cultura, Navarro Talegón, destacó la última adquisición, la obra "Jesús entre los doctores" que perteneció, junto a otras 14 tablas, al retablo de la iglesia del Salvador de Abezames, colección que fue realizada por Lorenzo de Ávila y Juan de Borgoña "El joven" y vendida en 1951 por el vicario capitular de Zamora, Amando Gómez, por 55.000 pesetas.

Durante muchos años la pieza estuvo en manos de una anticuaria catalana y, recientemente, la Fundación ha adquirido esta tabla en una subasta celebrada en Berlín por 20.210 euros. Otra de las piezas adquiridas por la Fundación en los últimos meses es una "Piedad" gótica que perteneció a la parroquia de la Santísima Trinidad de Toro y que fue vendida en el año 1962 por 20.000 pesetas, aunque la entidad ha tenido que abonar una cantidad importante para poder recuperarla. En esta exposición también se pueden admirar otras piezas que, de no ser por la intervención de la Fundación, habrían desaparecido. Uno de los casos más llamativos son los restos de la lápida de los Tomé, familia a la que perteneció Antonio Tomé, que fue enterrado en la iglesia de Santa Catalina. Tras el devastador incendio que asoló el templo en 1957, Navarro Talegón localizó esta lápida funeraria "fragmentada, pero entera" aunque, posteriormente, por los trabajos de desescombro ejecutados en el templo, fue destruida en parte y solo se conservan algunos fragmentos. Otro ejemplo es la recuperación de algunas partes de artesonados que desaparecieron en el siglo XIX, de los que uno, con toda probabilidad, perteneció a la desaparecida iglesia de San Juan de los Gascos, mientras que otro fragmento procede de la ermita del Cristo de las Batallas.

Al margen de la recuperación de obras de arte que fueron vendidas o de la intervención realizada en otras para evitar su desaparición, la Fundación ha adquirido, en los últimos años, otras piezas de pintura madrileña del siglo XVII. La exposición se completa con una colección de pinturas y esculturas, restos arqueológicos, planos, libros o el enrejado antiguo de un convento. En el montaje de la muestra, han colaborado Alberto Vaquero, Bernardo Medina, Carlos Andrés Hernández y José Espinosa. A la inauguración, asistieron los alcaldes de Toro y Abezames, Tomás del Bien y Donato Rodríguez, respectivamente, el diputado José Luis Bermúdez, concejales del Ayuntamiento y vecinos. La exposición se puede visitar de lunes a viernes, en horario de 10.00 a 13.00 y, por la tarde, de 19.00 a 20.30 horas.