La comunidad de religiosas Dominicas ha recuperado la antigua sacristía del monasterio del Sancti Spíritus de Toro y que, tanto las hermanas como los feligreses, podrán utilizar como "oratorio" y como "punto de encuentro", en el que prevalecerá la oración y la liturgia. La priora del convento, Mari Cruz Bosch, explicó que, con motivo de la celebración en la ciudad de la exposición Las Edades del Hombre, del Año Jubilar de la Orden de Predicadores y del VII centenario de la fundación del monasterio, la comunidad decidió recuperar la antigua sacristía, a la que se accede desde la iglesia.

Para poder acometer estos trabajos, el cenobio tuvo que recabar el preceptivo permiso de la Comisión Territorial de Patrimonio que autorizó la intervención, tras constatar que a la estancia se podía acceder a través de una antigua puerta que estaba tapada y que ha sido descubierta. Con esta intervención, como apuntó la priora, se ha podido recuperar la antigua sacristía que será utilizada por la comunidad, sobre todo en invierno, por el elevado coste que supone la calefacción necesaria para calentar la iglesia. Para poder acometer las obras, la comunidad solicitó colaboración a la Orden de Predicadores que concedió una ayuda para poder rehabilitar la antigua sacristía. Este espacio, será utilizado por las religiosas y feligreses que podrán acceder libremente para, como matizó Bosch, "rezar vísperas o el rosario", aunque la comunidad también tiene previsto dedicar los jueves a la "exposición mayor". Al margen de esta intervención, según confirmó la priora, el Sancti Spíritus adolece de otros problemas en cuanto a su estado de conservación por lo que la comunidad ha solicitado colaboración a la Junta de Castilla y León para actuar en otras estancias. Así, como destacó, una intervención se centraría en recuperar las "paneras", unas naves que representan la edificación más antigua del convento y que precisan la rehabilitación de las cubiertas que presentan un avanzado estado de deterioro. Del mismo modo, las Dominicas intentarán impulsar, si consiguen colaboración institucional, el "arreglo" de la fachada de la iglesia que, como reconoció la priora, "está muy deteriorada y supone un peligro", ya que se han desprendido "algunas piedras".