El Ayuntamiento de Toro convertirá la iglesia de La Concepción en un auditorio musical y en un espacio que, en un futuro, albergará un amplio abanico de actividades culturales. El alcalde, Tomás del Bien, destacó que la ciudad no dispone de espacios lo suficientemente amplios como para celebrar eventos musicales o culturales de primer orden, de ahí que el equipo de Gobierno haya decidido apostar por la recuperación de la iglesia de La Concepción, de titularidad municipal, para convertirla en un "lugar acorde a la política cultural que queremos seguir".

Por el momento, como explicó, el Ayuntamiento ha colaborado con la Fundación González Allende para tramitar la solicitud de una primera intervención que la Escuela Superior de Conservación y Restauración de Bienes Culturales está ejecutando, en el marco de una nueva campaña de verano, y que permitirá rehabilitar el retablo mayor del templo. A partir de esta primera actuación en el interior de la iglesia, el siguiente paso será ejecutar la restauración de las cubiertas que, como reconoció Del Bien, "están en precario".

La ejecución de este proyecto obligará a la Asociación del Santo Sepulcro y la Soledad a buscar otro lugar en el que poder almacenar las imágenes de esta cofradía que procesionan durante la Semana Santa por las calles de la ciudad. Sobre el requerimiento remitido a la cofradía, el alcalde reconoció que el Ayuntamiento está manteniendo conversaciones con la Asociación del Santo Sepulcro y con las parroquias que, como remarcó, "han entendido que no se puede prolongar el uso de un espacio público como la iglesia de La Concepción".

En este punto, recordó que, hace años, la cofradía fue alojada en el templo después de que el Obispado decidiera explotar su sede originaria, la iglesia del Santo Sepulcro, como un recurso turístico. No obstante, el alcalde tendió la mano a la cofradía para, entre todas las partes, intentar buscar una solución. Por último, remarcó la necesidad de "poner en valor" la iglesia de La Concepción, a la vez que aclaró que el Ayuntamiento de Toro tiene la obligación de "velar porque ese bien lo disfruten el mayor número de toresanos convirtiéndolo en un espacio cultural y de ocio".