"Un hecho sin precedentes en la ciudad". Así valoró ayer el alcalde, Tomás del Bien, la repercusión de la exposición de Las Edades del Hombre que, en poco más de un mes, se ha convertido en un revulsivo para la economía local y para uno de los sectores en los que la ciudad ha depositado mayores esperanzas de desarrollo: el turismo. En un primer balance, Del Bien aseguró que "es muy positivo y algo sin precedentes en Toro", como así lo demuestran las cifras de visitantes que, en poco más de un mes, han solicitado información sobre los atractivos de la ciudad en la oficina municipal de turismo y en el centro de recepción de turistas habilitado en el antiguo Alcázar.

Así, como destacó Del Bien, por ambas dependencias municipales han pasado, desde que el 28 de abril abriera las puertas al público la exposición Las Edades del Hombre, cerca de 17.000 visitantes, la mitad de turistas que, durante el pasado año, se contabilizaron en la Oficina Municipal de Turismo. Este dato hace presuponer que, si las visitas siguen una "proyección lineal" en los próximos meses, la cifra "crecerá muchísimo respecto al turismo habitual". Para el alcalde, la mayor afluencia de turistas se espera en los meses de verano cuando se "dispararán las visitas" una vez que finalice el curso escolar y comience el periodo de vacaciones. Por otra parte, subrayó que las visitas contabilizadas en el primer mes de apertura de Aqva son el fruto del trabajo de promoción y de "visualización" de Toro en los principales mercados emisores de turistas, en referencia a Madrid y a otras comunidades limítrofes. Resaltó Del Bien que la mayor afluencia de visitantes supondrá no solo un impulso turístico sino también económico, "impulso que Toro necesitaba", gracias al esfuerzo realizado por las administraciones y por el sector privado que ha apostado por actualizar sus negocios y empresas y que "están empezando a ver la recompensa".