Agricultores de Morales de Toro, a través de la Alianza Upa-Coag, han vuelto a exigir medidas de control sobre la población de conejos, especie que, un año más, está ocasionando importantes daños en el cereal y en viñedos. Pablo Domínguez, en representación de los afectados, aseguró ayer que, este año, la "plaga" de conejos se ha convertido en un "problema muy serio", ya que no solo están atacando al cereal sino que también está ocasionando "daños muy graves" en las viñas y que tendrán consecuencias para próximas campañas, ya que al comerse los conejos las varas y los brotes nuevos, "en dos o tres años estos viñedos no van a producir uva".

Ante esta situación, la organización agraria ha vuelto a denunciar que el Ministerio de Fomento no ha adoptado las medidas necesarias para proceder al descaste ni para controlar la población de conejos y, como subrayó, los animales han encontrado su hábitat en los terraplenes de autovías y carreteras y cuentan con refugios de densa vegetación, en zonas que fueron plantadas junto a ambas infraestructuras. Los mayores daños se localizan en parcelas colindantes a la autovía y las carreteras y, como explicó la Alianza Upa-Coag, por la ubicación de las madrigueras, situadas en los terraplenes, y la distancia obligada para proceder a su caza, ni los titulares de las fincas afectadas ni los cazadores de Morales de Toro pueden realizar capturas. Ante esta situación, la organización agraria considera que es el Ministerio de Fomento el que debe adoptar medidas que contribuyan a disminuir la población de conejos, contratando a empresas o particulares especializados en realizar capturas. Sin embargo, como subrayó Domínguez, por el momento la única respuesta de la Dirección General de Carreteras a las quejas de los agricultores es que sean las propias organizaciones agrarias las que, tras recabar los permisos necesarios, procedan a realizar controles sobre la población de conejos en Morales de Toro. Esta respuesta ha generado un mayor malestar entre los agricultores afectados porque, como matizó, el problema "lo han creado ellos y si quieren fauna que la mantengan", en clara alusión al Ministerio de Fomento.

Por último, Domínguez apuntó que, si la Administración no aporta soluciones a corto plazo, se convocará una asamblea para conocer la opinión de los agricultores afectados, en la que se decidirán qué medidas se pueden adoptar para frenar los daños ocasionados por los conejos en parcelas de cereal y viñedos.