La Archicofradía del Santísimo Corpus Christi y las parroquias de Toro han decidido trasladar el solemne Triduo Eucarístico, que se celebrará del 27 al 29 de mayo, a la iglesia de San Julián de los Caballeros, al no poder utilizar la Colegiata que, hasta noviembre, acoge la exposición Aqva de Las Edades del Hombre. El citado Triduo se celebrará el 27 y el 28 de mayo, a las 20.00 horas, mientras que el 29 de mayo, a las 19.00 horas, tendrá lugar la solemne eucaristía que dará paso a la procesión con el Santísimo por las calles de la ciudad.

El desfile procesional partirá de la iglesia de San Julián de los Caballeros para continuar por la plaza Delhy Tejero, calle el Sol, Santa Marina (dando la vuelta completa), calle Amor de Dios y La Reina, donde tendrá lugar la tradicional bendición de los niños nacidos en el año. Una vez finalizada la bendición, la procesión con el Santísimo proseguirá por la calle Cañuelo, Tablarredonda, Judería, Perezal, La Mayor, plaza Bollos de Hito y San Lorenzo el Real, para recogerse en el templo de salida.

Como cada año, las parroquias de Toro y la Archicofradía del Santísimo Corpus Christi han solicitado públicamente la colaboración de todos los toresanos para que engalanen balcones y las calles por las que pasará el Santísimo. Además, diferentes cofradías y vecinos tienen previsto colocar altares en el recorrido de la procesión. Por otra parte, la Archicofradía del Santísimo Corpus Christi ha convocado para el 28 de mayo, a las 18.30 horas, su asamblea general ordinaria que se celebrará en el salón de actos del Amor de Dios. Ese mismo día y al finalizar el Triduo, se celebrará la imposición de la medalla a los nuevos hermanos.

Para anunciar la Solemnidad del Corpus Christi, la Archicofradía ha editado un cartel realizado, de forma altruista, por Rosalía Pérez Barrales, en el que se rinde un homenaje a las monjas Sofías de Toro que, este año, conmemoran 700 años de su traslado al monasterio. En el citado cartel anunciador, la autora ha querido el reflejar el momento en el que, durante el paso del Santísimo por el monasterio de Santa Sofía, las religiosas arrojan pétalos de rosa y que se ha convertido en uno de los momentos más emotivos de la celebración del Corpus Christi y de la procesión.