Poner en valor las bodegas que jalonan el subsuelo de la ciudad y aportar soluciones para su mantenimiento y conservación. Estos son los objetivos que se ha marcado la concejalía de Obras y Urbanismo del Ayuntamiento para este año y el primer paso será actualizar el inventario de bodegas subterráneas elaborado hace años y que permitió catalogar y revisar alrededor de 300. La concejala del área, Ruth Martín, reconoció que profesionales y vecinos se han mostrado dispuestos a colaborar en este proyecto para mantener estas construcciones, que forman parte del patrimonio cultural e histórico de la ciudad. El primer paso, será revisar el inventario de bodegas redactado hace años porque, como matizó Martín, "está desfasado" y porque en dicho documento se asegura que la práctica totalidad de las bodegas están en buen estado, situación que no se corresponde con la realidad.
En este punto, la concejala socialista reconoció que la idea del Ayuntamiento es, con el permiso de los propietarios, visitar cada una de las bodegas y, sobre todo, "adelantarnos y no esperar a que surjan problemas para comprobar su estado". Con esta actualización del inventario, la concejalía de Obras y Urbanismo también pretende aportar soluciones para evitar problemas como filtraciones o posibles hundimientos. En principio, el Ayuntamiento descarta adoptar como solución hormigonar estas construcciones subterráneas "como nos piden algunos vecinos", ya que, según Martín, con esta opción no se erradican posibles problemas sino que "se trasladan a otros vecinos". Y es que, según Martín, el hormigón actúa como "una lámina impermeable que corta el problema del paso, pero el agua busca otra salida que acabará encontrando y el problema se trasladará al vecino". Así, Martín apuesta por adoptar otras soluciones como reforzar la estructura de las bodegas o utilizar otros materiales distintos al hormigón, con el fin de garantizar la conservación de un patrimonio emblemático y singular.
El último inventario elaborado por la empresa concesionaria del servicio de agua, en colaboración con la concejalía de Obras y Urbanismo, catalogó alrededor de 300 bodegas, después de que técnicos visitaran sus instalaciones. No obstante, con la actualización del inventario se visitarán otras bodegas que no fueron revisadas entonces.
