El Grupo Siro ha alcanzado un preacuerdo laboral que descarta los Expedientes de Regulación de Empleo de extinción hasta el próximo año 2015. En mitad de la tempestad que reina en Toro a colación de la implantación de los nuevos turnos y por los que diez de los empleados han decidido emprender acciones judiciales, en la planta que la empresa mantiene en la localidad burgalesa de Briviesca, los representantes sindicales han conseguido llegar a un acuerdo por el que la empresa repostera se compromete a no realizar despidos en masa en los próximos tres años, según una información recogida por la agencia Ical. Una medida que puede sentar buen precedente de cara a la turbulenta situación que actualmente vive la fábrica de Toro y que será aplicable también en esta localidad.

En el preacuerdo alcanzado entre los representantes de los trabajadores y el Grupo Siro se encuentra, además, un incremento salarial de carácter anual del dos por ciento, una reducción de la jornada de ocho horas al año desde 2014 y el mantenimiento íntegro, con el aumento correspondiente, de todos los pluses actuales incluido el de antigüedad. Habrá, de igual forma, un nuevo plus para el personal que efectúe su trabajo en sábado, domingo o festivo y se posibilita la excedencia voluntaria con reserva de puesto de trabajo.

Además, se mejorarán las prestaciones por incapacidad temporal hasta pagar el cien por cien durante toda la baja cuando el trabajador esté 48 horas hospitalizado y se realizará una distribución irregular de la jornada de once días al año, el cinco por ciento de la anual -la mitad de lo contemplado en la última reforma laboral- con unas compensaciones económicas que dependerán del día que se les ordene trabajar y del tiempo de aviso previo que les otorgue la empresa repostera.

Actualmente, la planta toresana del Grupo Siro cuenta con unos 260 empleados que se encuentran en una situación escabrosa al haberse visto afectados por la implantación de un nuevo turno de trabajo. Los representantes de los trabajadores pertenecientes a los sindicatos CC OO, UGT y CGT trabajan actualmente para conseguir una serie de mejoras en los derechos de los trabajadores y a las que estas medidas adoptadas en Burgos pueden favorecer de manera muy considerable.

Los sindicatos de Comisiones Obreras, Unión General de los Trabajadores y Confederación General de los Trabajadores se encuentran a la espera de una decisión respecto a la demanda de conflicto colectivo interpuesta recientemente tras no conseguir llevar a buen puerto las negociaciones con la empresa para la aplicación del nuevo turno implantado en la industria toresana. Además, diez trabajadores han acudido también a la vía judicial al interponer una reclamación a este respecto. Decisión, no obstante, a la que pueden sumarse el resto de los trabajadores -actualmente unos 260- para evitar que se implante este nuevo turno. Los representantes sindicales de CC OO, UGT y CGT han alegado que se trata de un «incumplimiento» del convenio colectivo en materia de turnos y que esta práctica supone la «vulneración» de los derechos de los trabajadores de esta planta de la localidad.