La campaña de recogida de remolacha en la comarca de Toro se alargará esta temporada hasta mediados del mes de febrero a causa de las inclemencias del tiempo que han impedido a los agricultores dedicar el tiempo necesario a esta labor. Actualmente se ha molturado únicamente un tercio de la producción total, que se estima que alcance este año en la zona norte „que comprende a las fábricas de AB Iberia de Toro, La Bañeza y Miranda, y a ACOR Olmedo„ una producción final de unos 2,95 millones de toneladas líquidas de remolacha, lo que supondría cubrir con facilidad la cuota asignada por la Unión Europea.

Según la información facilitada por la Alianza por la Unidad del Campo UPA-COAG, a día 25 de noviembre se habían contabilizado ya un total de 645.426 toneladas de remolacha líquida en las tres fábricas de AB Iberia, lo que supone un 32% del total de la remolacha aforada al comienzo de la campaña de recepción. En la fábrica de Toro, que fue la más tempranera para comenzar el proceso de molturación „arrancó la campaña el día 3 de octubre„ estaría ahora mismo en un 34% de su aforo, dos y un punto por encima de las fábricas de Miranda y La Bañeza respectivamente.

Hay que destacar que, hasta ahora, en la fábrica azucarera de Toro no se ha producido interrupción en las recepciones por motivos meteorológicos, habiendo sido continuada la molturación desde el comienzo. Sin embargo, sí que es cierto que "la periodicidad de las precipitaciones ha motivado una ralentización en el ritmo medio de molturación diaria" según informan los representantes de los sindicatos agrarios.

Teniendo en cuenta estos aspectos, desde la Alianza consideran que la temporada de la remolacha finalizará este año unos días más tarde de lo que es habitual, ya que acostumbra a terminar entre finales de enero y principios de febrero. "Considerando los aspectos referidos y salvo que en lo sucesivo las fábricas se vieran obligadas a interrumpir la campaña por exceso de estaríamos ante una campaña de recepción 2012/13 que se prolongaría hasta mediados de la primera quincena de febrero en Toro", anuncian los sindicatos.

Por otra parte, durante esta campaña las fábricas están registrando unos números prácticamente idénticos a los del año pasado en lo que a molturación se refiere. Así, de seguir en esta dinámica, se prevé una media de molturación fabril diaria de 7.150 toneladas de media al día en la Azucarera de Toro, situándose a nivel regional únicamente por debajo de ACOR Olmedo, que registra 10.080 toneladas, y por encima de las industrias de Miranda y La Bañeza que obtienen 4.740 y 6.360 toneladas de media respectivamente.

En cuanto a la marcha de la actual campaña de recepción 2012/13, hasta el pasado 25 de noviembre se han registrado unas medias de 17,82 grados polarimétricos en riqueza y 12,19 puntos de descuento en AB Iberia. Por lo que respecta a ACOR, los últimos datos oficiales, a fecha 18 de noviembre, eran de 17,90 grados y 10,12 puntos de descuento.

Para esta campaña, se espera una producción final global en la Zona Norte próxima a los 2,95 millones de toneladas líquidas de remolacha, cubriéndose de esta manera sin ningún problema la cuota asignada por la Unión Europea.

Actualmente, en la Azucarera de Toro se recibe la producción de remolacha de Salamanca, Zamora, Segovia, Ávila y parte de las provincias de Valladolid y de Palencia; en la de Miranda de Ebro se recibe de País Vasco, Navarra, Rioja, Burgos, Soria y parte de Palencia; en La Bañeza se recibe de León y parte de la provincia de Palencia y Zamora; y en ACOR se recibe de prácticamente todas las provincias de la comunidad de Castilla y León.

Por otra parte, los productores de remolacha siguen en su lucha particular por conseguir un mejor porte por tonelada tras la decisión de la Junta de Castilla y León de retirar los ya famosos tres euros y la reducción en las ayudas que actualmente está sufriendo todo el sector agrícola sin excepción. Además, mantienen otro pulso con la industria, a la que piden un mejor trato dada la elevada cantidad de recogida que aportan. A día de hoy, el precio por tonelada que se paga a los agricultores se aproxima a los cuarenta euros, cifra que todavía permanece muy por debajo de lo que cobran otros remolacheros de distintas zonas del país y bastante más inferior si la comparación se realiza con industrias de otros países.