El presidente de la Diputación de Zamora, Fernando Martínez Maíllo, aseguró ayer en la localidad de Villalonso, durante la celebración del Día de la mancomunidad Norte-Duero, que «es bueno que se siga manteniendo el principio esencial de la economía local, el municipalismo», sobre todo «en estos momentos en los que se están cuestionando muchas cuestiones que tienen que ver con el ámbito municipal». Maíllo apuntó que «desde la Diputación siempre vamos a defender la pervivencia de todos y cada uno de los ayuntamientos de la provincia». No obstante, matizó que «otra cosa bien diferente será el modelo de gestión que podamos llegar a aplicar en el futuro para ser más eficientes y para prestar mejor el servicio a los ciudadanos».

En este sentido, también aclaró que existe «un proyecto de reestructuración del conjunto de las mancomunidades, que habrá que ver cómo finaliza», aunque añadió que «en todo caso yo creo que lo más importante es el municipalismo, son los ayuntamientos, la gestión directa que puedan prestar a los ciudadanos, ésa es la esencia fundamental», siempre teniendo en cuenta que «otra cosa diferente es el modelo de mancomunidad» en cuanto a su tamaño y el número de servicios que pueda prestar.

Martínez Maíllo realizó estas declaraciones durante la celebración del Día de la mancomunidad Norte-Duero, que este año ha tenido lugar en la localidad de Villalonso, ya que esta fiesta se celebra cada año en una localidad diferente, de entre las 22 que la integran, con un día de convivencia al que asisten sus alcaldes, los vecinos y autoridades provinciales y regionales. Además, Martínez Maíllo destacó que «por encima del carácter institucional que tiene este acto, sobre todo es un día de convivencia y de hermandad entre los alcaldes de toda esta zona, que comparten servicios públicos importantes», y así hizo referencia a la recogida de basuras, que «es el servicio más importante que presta el conjunto de las mancomunidades de la provincia».

Por su parte, la alcaldesa del municipio anfitrión, Araceli Alonso, aseguró que «es un gran día para Villalonso porque no en todas las ocasiones se recibe a los 22 alcaldes de los municipios que pertenecen a esta mancomunidad», a lo que añadió que «tenemos el gran privilegio de contar con la presencia de autoridades», como el alcalde de Toro, Jesús Sedano, el presidente de la Diputación, el delegado territorial de la Junta de Castilla y León, Alberto Castro, y políticos como Óscar Reguera o Antonio Vázquez.

Por lo que respecta al funcionamiento de la mancomunidad Norte-Duero, el delegado territorial del Gobierno regional, Alberto Castro, señaló que «hace una labor fundamental porque sus pueblos son muy pequeños», y afirmó que «tenemos que garantizarles los servicios básicos, públicos».

Así, indicó que para conseguirlo «lo que hace la mancomunidad es agruparse, unirse para intentar prestar servicios». En este sentido, aclaró que «cuando hablamos de prestar servicios la gente quiere que se garanticen los mismos servicios que puede tener una capital, con salvedades», por lo que incidió en que en estos servicios básicos se incluyen la sanidad, la educación, la recogida de escombros, el reciclaje de residuos, o la limpieza de calles, «y en ese sentido yo creo que la mancomunidad funciona bien, está viva, más viva que nunca».

En cuanto a la celebración, Castro precisó que «en este día los alcaldes se juntan, se unen para buscar puntos de encuentro», y afirmó que «en ese sentido hay que reconocer que las mancomunidades han tenido pasado, tienen presente, y sobre todo hay que pensar que tienen futuro».

Sin embargo, respecto a la incorporación de nuevos servicios para esta mancomunidad, resaltó que «lo que estamos esperando todos es que se aclare todo lo que se está debatiendo en las administraciones», en cuanto a que todas las entidades de gobierno «están con la incertidumbre de qué va a pasar, qué va a pasar con la ordenación del territorio y qué va a pasar con la Ley, que se está hablando también a nivel nacional», y añadió que «en ese sentido tenemos todos que esperar, aportar, construir, presentar propuestas y enmiendas», de modo que «las competencias tienen que ser claras y tiene que prestarlas el que mejor puede prestarlas, porque lo más importante son los ciudadanos».