Las Diputaciones tienen que «adaptarse a los nuevos tiempos» para responder a las necesidades de los municipios. Esta es una de las conclusiones de la jornada sobre «La nueva ordenación del territorio y su relación con el desarrollo local», organizada por la Asociación Profesional de Agentes de Desarrollo de Zamora (AZADEL) y que ayer se celebró en la Casa de Cultura de Toro. Una treintena de profesionales participaron en esta jornada que fue inaugurada con la conferencia «La Ordenación del Territorio como herramienta para el Desarrollo Local», impartida por Fernando Manero Miguel, Catedrático de Geografía de la Universidad de Valladolid. Durante su ponencia, Manero invitó a los profesionales a realizar una reflexión sobre el concepto de ordenación del territorio y sobre «los desafíos» a los que se enfrentan las zonas rurales en Europa. Igualmente, Manero se refirió en su ponencia a la Ley de Desarrollo Sostenible, a la necesidad de mejorar la calidad de vida de los municipios o de afrontar el problema de la dispersión de los pueblos en Castilla y León. Además, citó algunas de las «herramientas» que al amparo de la Ley que se pueden utilizar para evitar el «deterioro» de la calidad de vida en los municipios, tales como «articular el territorio apoyándose en los núcleos funcionales más dinámicos, como las cabeceras de comarca» o la reestructuración de los servicios para que todos los ciudadanos puedan acceder a ellos en las mismas condiciones de igualdad y calidad. Tras esta conferencia, la presidenta de AZADEL, Sonia Merino, presentó a los participantes en la mesa redonda «Cambios en la ordenación del territorio en el medio rural, el papel de las Diputaciones». En esta mesa redonda participó Santiago Vázquez, coordinador de servicios de la Dirección de ordenación del territorio de la Junta de Castilla y León quien explicó a los participantes en esta jornada celebrada en Toro el modelo que ha diseñado la Administración regional sobre la ordenación del territorio. Precisó Vázquez que este modelo se basa, fundamentalmente, en la asociación voluntaria de municipios para la prestación de servicios para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. También se refirió Vázquez al papel que deben asumir las Diputaciones Provinciales en este modelo y subrayó que, aunque siguen desempeñando una función muy importante en zonas como Castilla y León, deberían modificar sus relaciones con los municipios, adaptarse a los distritos de interés comunitario y potenciar sus funciones de asesoramiento y asistencia técnica, jurídica y económica a los municipios.