La Guardia Civil ha abierto una investigación para tratar de esclarecer la autoría de un nuevo robo perpetrado en la madrugada de ayer, en una céntrica farmacia de la ciudad de Toro. Al parecer, el robo se produjo sobre las 4.00 horas y los presuntos autores accedieron al interior del local forzando la puerta de la farmacia, ubicada en la calle Tablarredonda, mediante el sistema de palanca. Ya en el interior del establecimiento, los ladrones se apropiaron solamente de dinero en metálico aunque, como confirmó la farmacéutica, únicamente buscaban billetes porque no se llevaron algunas bolsas de monedas utilizadas para el cambio. Los presuntos autores de este robo, según los datos recabados por este diario, no sustrajeron medicamentos de esta farmacia y se adentraron directamente en un despacho que se encuentra detrás de la zona de atención a los clientes y en el que revolvieron papeles y abrieron cajones, hasta que encontraron los billetes de los que se apropiaron.

En la céntrica farmacia se personaron ayer agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local aunque también efectivos de la Policía Judicial se trasladaron hasta el lugar de los hechos para intentar obtener huellas de los presuntos autores del robo y para iniciar la correspondiente investigación de los hechos. Además, las Fuerzas del Orden, según la información recabada por este diario, podrían estar analizando los videos de algunos establecimientos cercanos a la farmacia, al objeto de intentar obtener más datos sobre la identidad de los presuntos autores, un vehículo que utilizaron y sobre el modo que emplearon para acceder al interior del local. Al parecer, este nuevo robo, como señalaron fuentes próximas al caso, no guarda ninguna relación con los últimos cometidos en distintos comercios durante la pasada semana, algunos en una calle próxima como San Pedro, ya que el autor de estos hurtos fue detenido el pasado sábado por agentes de la Policía Local.

En las inmediaciones de la farmacia se congregaron, desde primera hora de la mañana los propietarios de la farmacia, vecinos y algunos clientes que se disponían a comprar medicamentos y tuvieron que regresar posteriormente ya que el local no pudo abrirse al público hasta que no finalizó la inspección ocular, con la que la Guardia Civil trata de hallar huellas sobre los autores de este nuevo robo. Además, los agentes intentaron recabar más datos sobre este robo entre los vecinos de la zona.