El sindicato UGT ha presentado una denuncia en el Juzgado de lo Social para impugnar las elecciones de los representantes del personal laboral en el Ayuntamiento de Toro, celebradas el pasado lunes y en las que CC.OO obtuvo ocho delegados y uno el sindicato CSIF. Así lo ha confirmado el secretario general de la Federación de Servicios Públicos de UGT, Jerónimo Cantuche quien aseguró que, el proceso electoral ha estado marcado por «falta de democracia» y por una presunta «manipulación». Explicó Cantuche que cuando se presentó el censo electoral provisional, UGT realizó un cómputo y estimó que los representantes a elegir eran cinco, por lo que conformó una candidatura integrada por seis personas.
El 26 de abril UGT comprueba que el censo electoral publicado «incorpora a ocho trabajadores que no tienen contrato con el Ayuntamiento».
Como relató Cantuche, este «hipotético» censo contaba con 103 trabajadores, de los que «ocho no tienen contrato a fecha de publicación del censo», por lo que UGT presentó un escrito de reclamación ante las mesas y ante la Oficina Territorial de Trabajo. En la proclamación de candidaturas, el sindicato UGT es informado de que «al pasar de 101 trabajadores se elegirán nueve representantes» y, por tanto, su candidatura ya no era válida por lo que ha decidido interponer una demanda en el Juzgado de lo Social. El próximo lunes, como avanzó Cantuche, se celebrará un «laudo», al que acudirá UGT, con el propósito de «defender la legalidad que no es otra que los trabajadores puedan votar libremente».
