Aunque casi 900 pueblos han desaparecido en España en los últimos 15 años, Morales de Toro parece haber encontrado la fórmula para incrementar su población, gracias en parte, a la llegada de inmigrantes de distintas nacionalidades, sobre todo de ciudadanos rumanos.

En los últimos siete años, el censo del municipio ha pasado de 1020 a 1250 habitantes, de los que cerca del 16% ciento son inmigrantes que, en su día, decidieron empadronarse en Morales de Toro donde además han fijado su residencia y trabajan, sobre todo en el sector de la agricultura porque el viñedo sigue siendo la principal fuente de ingresos de muchas familias en este municipio. Aunque en los últimos siete años, han sido numerosos los inmigrantes que han recalado en Morales de Toro, atraídos sobre todo por la campaña de vendimia, en la actualidad más de 200 rumanos residen en este municipio, de los que, en la actualidad, tan sólo una decena de inmigrantes residen en la zona conocida como «Las bodegas», en la que, durante la campaña de recolección de uva, se asientan ciudadanos rumanos, mientras que el resto residen en viviendas «dignas». Otro de los motivos que han propiciado este incremento de población es que el alcalde, Luis Segovia, ha conseguido convencer a otros moralinos que residen en otros puntos de España, sobre todo en el País Vasco, para que al menos uno de los miembros de la familia, se empadrone en el municipio y que paguen algunos impuestos municipales, ingresos de los que se beneficia el Ayuntamiento y que se destinan «a arreglar calles del pueblo o a mejorar servicios básicos».

Del mismo modo parejas jóvenes de la zona o que trabajan en distintos municipios de la comarca, han decidido fijar su residencia habitual en Morales de Toro. El incremento de población garantizará, según explicó el regidor, el mantenimiento de algunos servicios esenciales y también permitirá mantener abierto el colegio, al que diariamente acuden 60 niños. A juicio del alcalde moralino, el crecimiento experimentado por la localidad en pocos años ha sido posible gracias a que «el pueblo cuenta con todos los servicios básicos», lo que garantiza que los vecinos «tengan una buena calidad de vida». En este punto el mandatario municipal recordó que en la localidad de Morales de Toro existen comercios, establecimientos hosteleros o una farmacia.

También en este municipio se localizan seis importantes bodegas de la Denominación de Origen Toro, dos talleres mecánicos, talleres de venta y reparación de maquinaria agrícola, residencias de ancianos o la empresa dedicada a la fabricación de carrozas.

Además, resaltó que, después de conseguir el acceso a la autovía, han mejorado las comunicaciones con Valladolid o Zamora.