La Fundación del Patrimonio Histórico ha iniciado ya la excavación arqueológica y la lectura de los muros del puente mayor de Toro, conocido popularmente como Puente de Piedra, cuyos datos incorporará a la redacción del plan director que tiene como objetivo definir su restauración y puesta en valor. La Fundación cuenta con la colaboración del ayuntamiento de Toro para abordar los trabajos, que requieren una inversión de 84.000 euros. La Fundación del Patrimonio Histórico aporta la mayor parte del presupuesto, 63.000 euros (75%) además de dirigir las labores, mientras que el consistorio colabora con 21.000 euros (25%), que asumirá con fondos propios.

Esta investigación, según ha informado la Fundación, revelará «la evolución histórica y constructiva del puente», declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en abril de este mismo año 2009, de modo que «el proyecto a seguir para su recuperación se adecue a sus necesidades reales». La excavación arqueológica en las desembocaduras del puente tendido sobre el Río Duero servirá para «conocer antiguos pavimentos, definir las fases de su construcción, determinar las sucesivas reparaciones y los materiales que han podido ser reaprovechados».

Está previsto excavar en tres sondeos, que suman una superficie total de 37 m2, localizados sobre el tablero en las desembocaduras del puente y en el arranque de la estructura que aparece en la margen derecha junto a dos arcos cegados. La lectura de los estratos de los muros, la excavación arqueológica y la redacción del informe que ponga en relación todos los datos obtenidos ocupará a dos arqueólogos durante cerca de tres meses.

La iniciativa de esta intervención de la Fundación del Patrimonio Histórico proviene del concurso escolar «Los Nueve Secretos», que premia la motivación y el esfuerzo de alumnos y profesores al presentar trabajos de calidad sobre el patrimonio mueble, inmueble o arqueológico que necesita ser recuperado. En 2007, el jurado del concurso premió el trabajo presentado por el colegio Medalla Milagrosa de Zamora, titulado «El legado del puente», con propuestas para recuperar y difundir este bien.

El también llamado Puente de Piedra, una de las imágenes más representativas de Toro, se construyó entre los siglos XII y XIII, con 22 arcos y una calzada de grandes losas de piedra. y el papel que ha desempeñado históricamente ha sido muy importante. Las modificaciones de los siglos XVI y XVII hicieron desaparecer gran parte de la obra original. Actualmente, acusa un deterioro grave, según la Fundación. El inmueble ha sido objeto de diversas intervenciones a lo largo de la historia, destinadas a su consolidación, aunque también se han perdido o eliminado varios elementos arquitectónicos e incluso una antigua capilla que albergaba bajo la advocación de la Virgen de la Guía.

La Fundación del Patrimonio Histórico de Castilla y León es una entidad privada, sin ánimo de lucro, constituida, en 1997, por Caja España, Caja Duero, Caja de Burgos, Cajacírculo, Caja Segovia, Caja de Ávila y la Junta de Castilla y León, para fomentar la conservación, la restauración y la difusión del Patrimonio Histórico.