La Guardia Civil ha auxiliado a una niña de 3 años que se encontraba sola en una vivienda y asomada al balcón, llorando, con medio cuerpo por encima de la barandilla y con riesgo de precipitarse al vacío, en una vivienda de la localidad almeriense de Roquetas de Mar.

Según ha informado hoy la Guardia Civil en una nota, los hechos tuvieron lugar el pasado martes después de que una llamada al 062 alertase de que había una niña que lloraba en el balcón de un segundo piso, y que ninguna persona mayor de edad se encontraba con ella.

Los agentes del puerto de Roquetas de Mar se trasladaron al domicilio y comprobaron que la pequeña se encontraba agarrada a la reja del balcón, junto a una maleta, llorando, a la vez que hacía ademanes con las manos y llamaba a su madre.

Los vecinos del inmueble informaron a los agentes de que, instantes antes, la menor se había subido a la maleta y había sacado medio cuerpo por encima de la barandilla con riesgo de precipitarse al vacío.

Ante esta situación, los guardias civiles subieron a la vivienda e intentaron que la pequeña llegara hasta la puerta del domicilio, en el interior del inmueble, y evitar así el peligro de una caída.

Sin embargo, "debido a la corta edad y el estado de nervios en el que se encontraba, no hacía caso a las indicaciones realizadas por los agentes para abrir la misma", apunta el Instituto Armado.

Ante esta situación, los agentes procedieron a desmontar la mirilla de la puerta para tener mayor visión del interior de la vivienda, observar a la menor y poder hablar con ella para tranquilizarla.

En paralelo, intentaron localizar a algún adulto o familiar de la menor que residiera en la casa pero al no lograrlo, y debido al estado de nerviosismo de la niña, acabaron por forzar la puerta para acceder a su interior.

Los agentes custodiaron a la pequeña hasta que la madre se presentó en la vivienda y le informaron de que iba a ser investigada como presunta autora de un delito de abandono de menores.

La niña fue trasladada hasta dependencias de la Guardia Civil, donde fue recogida poco después por su padre.

Las diligencias instruidas por la Guardia Civil han sido remitidas al Juzgado en funciones de Guardia de Roquetas de Mar, así como a la Fiscalía de Menores de Almería.