Este lunes se cumplen tres meses de la desaparición de Diana Quer,, la joven de 18 años que fue vista por última vez tras asistir a una fiesta en A Pobra do Caramiñal, el municipio coruñés donde pasaba las vacaciones de verano. La Guardia Civil trabaja en las diferentes líneas de investigación que podrían dar con el paradero de la joven, cuyo teléfono móvil apareció a finales del mes de octubre en el mar en una zona muy próxima al puerto de Taragoña, en Riaxno, a unos quince kilómetros del municipio donde desapareció la chica.

Ese teléfono, un iPhone de color blanco, fue la primera pertenencia de Diana hallada, pero su mal estado tras pasar tanto tiempo sumergido ha dificultado las labores de investigación, hasta el punto de que aún se trabaja sobre ese dispositivo por si de él se pudiera extraer información relevante sobre las últimas conversaciones de Diana. El contenido del móvil, la declaración de los testigos o las imágenes recogidas por las cámaras de seguridad son algunos de los elementos que están centrando las investigaciones que desarrollan la Policía Judicial de la Guardia Civil de A Coruña y de la Unidad Central Operativa (UCO).

Entre tanto, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Ribeira -encargado del caso- ha decidido prorrogar un mes más el secreto del sumario para evitar que la filtración de datos perjudique aún más las pesquisas. Tras la desaparición de la joven, se difundió una descripción en la que se decía que vestía pantalón corto rosa, camiseta blanca, sudadera y zapatillas negras con cordones, pero parece que pudo haber cambiado su vestimenta, según los testimonios de personas que dicen haberla visto esa madrugada.

A pesar de las dificultades que encierra el caso, poco a poco los investigadores de la Guardia Civil van logrando avances. Los agentes han conseguido localizar el vehículo desde el que se cree que fue lanzado el teléfono móvil de la joven a la Ría de Arousa. A través de las cámaras de tráfico instaladas en la autovía AG-11, los efectivos han centrado toda su atención en un coche que circulaba por el puente bajo el cual apareció el Iphone 6 a la hora que se cree fue arrojado este terminal.

Los investigadores, según señalaron en Espejo Público, dieron con un vehículo que circulaba sobre el viaducto de la mencionada autovía que cruza la Ría de Arousa en las inmediaciones de Taragoña. Las imágenes captadas por las cámaras de tráfico únicamente permiten ver unos focos, que aparecen muy difuminados por la ausencia de iluminación, por lo que ha sido imposible la identificación del modelo de coche por el momento. Los investigadores sospechan que el teléfono móvil de Diana se arrojó a las 02.58 horas horas a la ría donde hace semanas fue localizado casualmente por un mariscador. También en El Programa de Ana Rosa se hicieron este lunes eco de la identificación del vehículo que podría estar implicado en el caso de la desaparición de la joven madrileña, ahondando en que una de las vías de investigación para tratar de poner nombres y apellidos a la persona o personas que viajaban en el mismo es el de analizar los teléfonos móviles que coincidan en el tiempo y en el mismo lugar en el que se detectó la señal del terminal de Diana.

Y este martes, el delegado del Gobierno en Galicia, Santiago Villanueva, volvió a referirse al caso para señalar que los investigadores siguen con el análisis del móvil de la chica, pero que todavía "no hay datos exactos" sobre este dispositivo.

"Ese proceso está iniciado, no está acabado", puntualizó sobre el examen del teléfono, explicando que, por ahora, "no hay datos exactos del móvil" y que éste se sigue analizando para comprobar si la información de alberga es "útil" y si se puede incorporar, o no, a la investigación. "Todas las hipótesis están abiertas", agregó Villanueva sobre el caso, asegurando así que "todavía no hay nada descartado".