La Policía Nacional ha desarticulado una organización dedicada al tráfico de drogas, sobre todo marihuana y hachís, a gran escala en España y resto de Europa en una operación que se ha saldado con veinticinco detenidos en las provincias de Albacete, Valencia, Jaén, Alicante y Baleares.

Entre los arrestados se encuentra su líder, S.A.R.O., un conocido traficante de drogas de Albacete, informa la Dirección General de la Policía.

Los detenidos (veinte hombres y cinco mujeres con edades de entre 19 y 55 años) también distribuían otras sustancias estupefacientes, como cocaína y psicotrópicos, y generaban grandes beneficios que ocultaban a través de un entramado societario de compraventa de metales preciosos y cigarrillos electrónicos.

Se han desmantelado cuatro plantaciones de marihuana, tres en la provincia de Albacete y una en la isla de Ibiza, y se ha interceptado un camión en el que se han encontrado camuflados veinticinco kilos de marihuana y nueve de hachís.

Los detenidos conformaban una estructura especializada en el cultivo, transporte y venta de diversas drogas, especialmente las derivadas del cannabis sativa.

Los agentes detectaron a mediados del año pasado operaciones irregulares por parte de S.A.R.O., quien al parecer había reiniciado su actividad de narcotraficante.

Los indicios alertaban a los investigadores de la nueva organización que estaba dirigiendo desde Albacete para vender drogas en diversos lugares de España y en otros países europeos.

La Policía comprobó que estaba distribuyendo marihuana y hachís a gran escala aprovechando el transporte de vehículo de gran tonelaje y sirviéndose de un grupo de colaboradores que se dedicaba al cultivo, elaboración, transporte y venta de drogas y que también mantenía una extensa red de distribución en Ibiza.

Los implicados contaban con proveedores asentados en otras provincias como Cuenca y Granada, que disponían de plantaciones y recibían el asesoramiento y la colaboración de personas vinculadas al sector de la horticultura técnica y al cultivo intensivo de cannabis sativa.

Los grandes beneficios que obtenían los ocultaban a través de un entramado societario administrado directamente por un miembro destacado de la organización en el que figuraban empresas de comercio minorista de consumibles y de compraventa de metales preciosos, de cigarrillos electrónicos y de otros productos para justificar un alto nivel de vida.

Los miembros de la red tomaban medidas de seguridad para dificultar la investigación policial basadas en la experiencia del principal responsable de la organización, traficante de drogas desde hace años y que ya ha cumplido condena por ello.

De esta forma aleccionaba en sus distintas funciones a los otros miembros del grupo, que aprovechaban las últimas tecnologías para la intercomunicación.

La última fase de la operación policial, diseñada por la Comisaría de Albacete, ha contado con la colaboración de la de Ibiza, donde se han practicado seis detenciones, se han efectuado cuatro registros, se ha desmantelado una plantación de marihuana y se han intervenido efectos y droga.

La operación desarrollada en la península se inició con la interceptación de un camión cuando se estaba cargando droga en el mismo en el polígono industrial de Camporroso de Chinchilla de Montearagón (Albacete).

En el registro efectuado los agentes encontraron muy bien camuflados veinticinco kilos de marihuana y nueve de hachís.

El resto de componentes de la organización fueron sorprendidos poco después en las localidades donde residen, nueve en Albacete, tres en La Gineta, dos en Chinchilla y uno en Villarrobledo, todos ellos municipios albaceteños, además de otro en Novelda (Alicante).

Además de numerosos efectos y vehículos la Policía ha intervenido más de un kilo de cocaína, doce de hachís y sesenta y cinco de marihuana (una parte en cogollos embolsados al vacío para largos recorridos), además de 150 dosis de éxtasis y 123 de LSD, 8,33 gramos de MDMA, diez mil euros, un rifle y dos pistolas simuladas.